Después de sinsajo

Seguir adelante

No podiamos quedarnos más tiempo allí. Tenía que soltar a Ethan pero me parecía demasiado difícil apartarlo, con mi mano bajo su cabeza lo fui dejando tendido en el suelo delicadamente. Lo miré detalladamente como la primera vez, nunca había observado bien sus largas pestañas, recuerdo haber pensado que él era guapo, y lo seguía siendo ahora pero eso se terminaría, al igual que su vida.

Me puse de pie de una vez por todas, Alexander tambíen se levantó y me miró, se daba cuenta de que a pesar de que no me había vuelto demasiado cercana a Ethan, me había dolido su muerte, si esto llegara a pasar con Alexander estoy segura de que no lo resistiría.

- Bien, ahora tengo que ayudarlos.- dijo Dominic.

- No tienes que hacerlo sólo porque el lo dijo.- le dije.

- Lo sé, pero lo necesitan. Tengo que llevar la carpeta que lleva el en la mochila.- apuntó a Alexander.- Con la presidenta.

- ¿Te refieres a Coin?.- preguntó Alexander.

- Estás muy retrasado de noticias, Coin murió, ahora la presienta es Paylor.- le respondió Dominic.

- ¿Y ella cómo es?.- pregunté.- ¿Es igual a Coin?

- Coin era una perra.- respondió Dominic.- Una muy traicionera y mentirosa, eso dice toda la gente. La presidenta Paylor no lo es.

- Entoces le llevarás la carpeta, pero durante ese tiempo ¿Donde estarémos nosotros?.- preguntó Alexander.

- Pueden acompañarme allá.- respondió.

- ¿Estás loco, o acaso es una trampa? Porque supongo que sabes que si, yo voy allá hay muchas probabilidades de que nos maten.- le dije.

- Si Coin estuviera a cargo,eso que dices podría pasar, pero estoy casi seguro de que Paylor no lo permitiría.- nos dijo tranquilo.- No pierden nada con intentarlo.

- ¿Me crees estúpida?.- le pregunté.

- Bueno, eres nieta de Snow...- me dijo el sonriendo, se notaba que esta situación le divertía.

- Pero eso no significa que sea igual de estúpida que él.- le grité.- Además... él no era... Olvídalo.- le dije enojada.

- Está bien, lo olvido, pero si no van conmigo no creo poder ayudarlos.- Bajé la vista, Alexander se me acercó y me dijo:

- Quizá deberíamos ir, si es cierto lo que dice el sobre la presidenta ella podría ayudarnos.

- Está bien, iremos.- le dije, miré a Dominic.- Si morimos será tu culpa.

Empezamos a caminiar a la salida, dejando a atrás los momentos que pasé ahí, y tambíen dejando a Ethan. Con suerte no regresaré nunca a ese lugar.

Había una camioneta para los agentes de la paz afuera, seguramente el hombre que asesiné llegó en ella.

- Yo conduzco.- dijo Dominic.

- Somos niños ¿Lo sabías? Se supone que no deberíamos hacer nada de esto.- le dije.

- No sé que pienses tú, pero después de todo lo que hemos pasado, ya no somos niños, tú mataste a alguien y sólo tienes ¿Catorce o quince? No lo sé, pero yo, ya no me considero un chico de dieciséis.- subió a la camioneta, Alexander subío al asiento del copiloto, yo iba atrás, cerré la puerta.

- Catorce.- Susurré. Catorce. Y ya he asesinado a alguien.

- Después de todo.- comenzó a decir Dominic.- Katniss Everdeen no es muy mayor que digamos y mira todo lo que ha logrado.