Mis Oc's [Part. 7]

• One-shot •

Título: "La misma sangre"

Personajes: Koi - Astenia - Argos - Samael - ???

Advertencias: Menciones de sangre.

Aclaraciones: Aquí se verá más a fondo la historia de Koi.

AU: Mágico.

______________________________________

La mujer de cabellera negra estaba caminando de acá para allá llena de angustia y preocupación ¿Estuvo bien contratar a esos tales guardianes para proteger a Koi? El alma de el pequeño niño aún seguía en manos de Argos, ese maldito ángel y por sus descuidos ahora trabajaba para el.

- Tía Astenia, me marea jaja

- A-Ah, lo siento Koi, solo.... Estoy estresada por el trabajo.

- En ese caso debe descansar ¡Yo puedo ayudarla con eso!

Se veía tan feliz, estaba segura de que el no tenía ni idea de lo que pasaba.

- Si, yo-

En ese momento sintió que ese maldito ángel de ojos vendados la llamaba, miro por la ventana y este estaba en el patio de su castillo y todas sus rosas estaban marchitas, a su lado Samael con una rostro que mostraba un poco de angustia ¿Que podía significar eso? No lo pensó mucho y bajo, Koi la siguió por insistencia.

- ¿Que nescitas Argos?

- Ya supe lo que hiciste.... Ah~, es un poco estúpido que pensaras que no me daría cuenta.

-.... Yo hice lo que tenía que hacer y no me arrepiento.

Koi miraba a los dos adultos confundido ¿Estaban enojados? ¿Que había pasado? Pero dejo de mirarlos para dirigir su vista a el joven de cabello blanco que lo miraba fijamente, era la primera vez que se encontraban, aunque si tía Astenia ya le había hablado de el y dejo en claro que no se acercara.

- Mereces un castigó, para que entiendas que esto no es un juego y aprendas a no subestimarme.

-... Deja a Koi fuera de esto....

- Creo que sería bueno que el también entienda el mensaje.

En eso miles de cadenas echas de plata empezaron a envolver el cuerpo de la vampiresa.

- ¡AGH!

Lanzó un quejido desgarrador al cielo al sentir como su cuerpo se quemaba bajo el contacto, los vampiros eran débiles ante este material y por su puesto Argos lo sabía, logrando que cada vez más cadenas envuelvan el cuerpo de la mujer haciendola chillar del dolor. Koi presenciaba todo horrorizado y por más que Astenia gritara que se fuera el no podía escucharla en su trance.

- Mira Koi, esto es lo que se gana tu dulce tía por no seguir las reglas ¿Vas a seguir sus pasos o prefieres ser un buen niño?

Pregunto el hombre de tez morena estando ahora detrás del infante contemplando la escena sin remordimientos, en cambio el más bajo de ellos no dijo nada y su cuerpo empezó a sentirse extraño, como si algo lo estuviera absorbiendo, pensamientos oscuros que no eran los suyos invadieron su mente, sus ojos estaba apagados pero eran más brillantes que nunca, toda su conciencia se nublo y su corazón se llenó de odio.

-.... Déjala en paz....

-... Veo que ya despertaste Koi, eso me pone feliz... Hijo de lucifer.

La apariencia del antes dulce niño ahora era una aterradora, macabra y digna de una criatura horrenda salida del infierno, Samael miraba a su hermano con un poco de lástima pero no dijo nada.