Me preguntó el Cielo,
Que cuál era mi mayor deseo,
Yo me quedé pensando,
Pero no mucho tiempo.
¿Para qué reconsiderar una respuesta que ya sabes?
Entonces le miré,
Al Cielo,
Y le respondí lo siguiente:
"Deseo ver su rostro, cuando tocado por los dedos de la aurora, despierte de su sueño.
Quiero tocar su mano cuando tenga frío, para darle calor.
Y quiero darle alas para volar, cuando se sienta aprisionada en el fuego.
Adoraría tener siempre sus labios, que me dicen palabras de ataraxia; susurradas a mi oído cuando me siento perdido en el vacío lleno de dolor, y me trae de vuelta.
Esos labios que parecen ser el portal que te transporta a un mundo completamente diferente a este, con solo besarlos.
Sería eternamente (o lo que dure mi existencia) feliz si ella me abrazara cuando lo vea prudente; y que eso sea cada vez que yo desee —o sea Siempre—.
Entregaría mi alma al sabueso del infierno si ella me lo pudiese.
Viviría en los desiertos de la incertidumbre si fuese su mandato.
Daría todo y también lo que no tengo, ¡Oh cielo!
Mi mayor deseo es ser amado por ella, eternamente".
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Filamentos estelares -poemario-
PoetrySígueme en ésta travesía por el cosmos emocional, la mente de una persona que lidia con la inestabilidad de su propia psique. Vagando en el etéreo vaivén de los sentimientos humanos; ya sabemos que cada uno de nosotros es un universo propio, brilla...