14 de agosto, 2020.
Me había traído el vestido y el maquillaje al trabajo para no tener que pasar por el apartamento. Un vestido nuevo que había comprado hacía poco tiempo. Este era de color negro, sin tirantes, atado por el cuello y con una abertura en el muslo. Elegí un maquillaje en tonos verdes para resaltar mis ojos.
Salí del baño que había en la planta en la que trabajaba y fui de nuevo a mi oficina para recoger mis cosas e irme hacia la mansión Ventura. Me había enterado por la asistente que me recibió el primer día que habían contratado taxis para que nos llevaran directamente a la mansión ya que nadie sabía dónde se encontraba.
La puerta del despacho de Simone estaba cerrada, pero por debajo asomaba una luz. Iba a irme, pero mi instinto me dijo que tocara su puerta y comprobara que todo estuviera bien.
—¿Señor Ventura? —no hubo repuesta por su parte y decidí abrir lentamente la puerta.
Simone se encontraba en el centro de la habitación con la camisa descubierta dejando ver los tatuajes que tenía, pero que no pude observar bien, miré hacia todos lados, pero no había nadie más con él. Segundos después comenzó a abrochársela y en ese momento se dio cuenta de mi presencia.
—¿Necesitas algo?
—No, simplemente vi que había luz y te llamé, pero no me contestaste y pensé que te había pasado algo.
—No tienes que preocuparte por mí, sé cuidarme solo.
—En ese caso bajaré a por un taxi, le veo en la fiesta. —él asintió y cerré la puerta tras de mí.
Cuando salí de la empresa, pero para mí desgracia vi que no había ningún taxi aparcado esperando a los últimos empleados. No sabía la dirección de la mansión y mucho menos tenía como llegar.
—¿Otra vez? —la voz de Simone apareció tras de mí.
—¿Por qué siempre que quiero un taxi no hay?
—Porque todos los empleados se fueron hace una hora y a ti siempre te gusta salir tarde por lo que parece.
—Que mala suerte tengo. Bueno, pues la próxima vez será. Hasta el lunes, señor Ventura.
Me di la vuelta y comencé a caminar en dirección al apartamento. Pero el agarre de Simone hizo que parara en seco y me girara para mirarlo.
—¿Piensas escaquearte de la fiesta?
—No, simplemente no tengo como ir y usted llega tarde.
—La llevaré, pero la próxima fiesta sal antes de la oficina.
—Lo prometo. —hubo una sonrisa por parte de los dos y me hizo sentir muy cómoda todo el viaje hasta su mansión.
La mansión Ventura era enorme, más grande de lo que parecía en las fotos. Había una posibilidad de que Aaron estuviera en la fiesta, necesitaba un momento para hablar con él y decirle que me iría del apartamento. No quería tener esa conversación en casa porque sabía que su novia se metería y no me apetecía volver a discutir con ella, era tiempo perdido.
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La Infiltrada (+18)✓
RomanceLibro 1 Completo [Bilogía Mafia] REESCRIBIENDO Cuando la cordura y lo prohibido se juntan en dos personas distintas, Chiara tendrá qué decidir que es lo que prefiere. Ella es agente de la DEA y su nueva misión es infiltrarse en la mafia más poderosa...