Decisiones difíciles

136 12 3
                                    

Louise: No se veía una fuerza militar de tal tamaño desde hacia años... es impresionante.

Fritz: ¿Esto es o mas grande que pueden reunir?, ¿60.000?

Louise: Depende, por ejemplo en Germania, algunas estadísticas históricas hablan de hasta 100.000, sobre todo en las cruzadas en la Tierra Santa... pero como dirían, la fuerza no siempre se sobre pone a la habilidad y la estrategia... y esos elfos tenían ambas.

Fritz: Je, no has visto nada, en mi mundo somos capaces de movilizar diez veces mas de tropas que esto... nein <<no<<, veinte veces mas.

Louise:  (impactada)  ¿QUEEEE?, estas siendo exagerado... nadie puede movilizar tanta cantidad de gente ni mucho menos mantenerla... es prácticamente imposible.

Fritz: Jejejeje...

Louise: ¿Qué es tan gracioso?

Fritz: Nein <<No>>, no es nada jeje.

Louise: Rrrh... IDIOTA  (le da una patada en la pierna)

Fritz: Aauh... eso duele.

Louise: Hmhp.

Fritz: ...Pero ja <<si>>... es increíble la vista de una flota de barcos flotantes en pleno cielo... no creo que se vea muy a menudo.

Louise: Si, en eso tienes razón.

Los dos jóvenes miraban desde un barandal la muy espectacular vista de la flota germano-tristiana en los cielos, mas de una centena de barcos componían la primera ola de invasión compuesta principalmente barcos militares, algunos de transporte, suministros y transportadores de dragones y sus jinetes, en uno de estos barcos transportadores de dragones se hallaban nuestros protagonistas, precisamente era el barco de mando de la flota.

El aterrizaje no fue difícil, nada que unas sogas no resolvieran, lo preocupante era sujetar dicho aeroplano a la pista ya que este estaba en constante movimiento y los vientos podían hacer de las suyas, por lo que resolvieron sujetarlo con cuerdas para mas seguridad.

Una ves resuelto esto, tanto Fritz como Louise fueron a la habitación de ella para dejar las cosas, que eran sorprendentemente pocas, la mochila de Fritz con sus pertenencias, sus armas y una maleta en donde iban las cosas de Louise, luego de eso fueron a reportarse con Henrietta, la cual estaba de inspección en el barco para asegurarse de que todo iba según lo planeado y saber de los movimientos de la flota personalmente, pero estaba en una reunión con algunos generales, por lo que mientras esperaban mataba el tiempo observando las vistas del cielo.

Finalmente llegó un guardia para llamarlos a ambos y llevarlos a una sala reservada de la nave en donde se encontraba Henrietta, al entrar, hicieron la reverencia normal y finalmente los saludos.

Henrietta: Oh mi Louise François, que bueno verte.

Louise: El gusto es mío.

Henrietta: Y también tu, Fritz, es bueno volver a verte.

Fritz:  (asiente) 

Louise: Estoy aquí para servirle en lo que sea, haré todo lo que usted me pida.

Henrietta: Oh Louise, de eso no tengo duda... pero antes relajémonos un poco, solo un poco, esto de comandar un ejercito es... estresante.

Fritz:  "Ni se imagina como es por allá"

(Media hora de descanso después)

Henrietta:  (Terminado de sorber su té)  Bien, ahora pongámonos en materia seria.

Zero no Tsukaima - BruderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora