Capitulo 27.

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Pasando los minutos, pude sentir comodidad en mi cuerpo, estaba cálido en donde me encontraba,¿acaso había muerto?. No pude evitar hacerme esa pregunta, si, lo más seguro es que así sea...¿Entonces estoy en el cielo?.

Poco a poco abrí mis ojos, espere encontrarme en el lugar llamado "paraiso", pero no fue así. Conforme mi vista se iba aclarando pude ver un techo blanco acompañado por una leve luz del sol; se suponía que debía ver el cielo azul,¿no?.

—¡Despertaste!.- oi una voz masculina.- ¡Oh,ire a decirle a Padre!.

¿Padre?,pensé. No pude girar mi cuello, algo me lo impedía, a lo que yo seguí observando el cielo, con detenimiento y algo desconcertada; pero no dure mucho así.

—¡___!.- una voz resonó en mi cabeza. La voz de Haru.

Agrande mis ojos y una gran desesperación se apoderó de mi, ¿Donde estaba?,¿Que había pasado?,¿Qué estoy haciendo aquí?,¿Por qué ese sentimiento de soledad y oscuridad?.

—¡Por aquí!.- nuevamente su voz sonó.

Sin pensarlo dos veces me levanté de donde me encontraba, al hacerlo me lastime pero en realidad no me importo, quite los cables que tenia y solo me deje lo que estaba en mi cuello, si, era molesto pero lo que me importaba era encontrarme con mi gemelo, era todo lo que necesito.

Abrí la puerta abruptamente, sobresaltando algunas personas que se encontraban cerca de ahí, estaba en el hospital, ahora tenía sentido esa aroma, ese estúpido aroma que odio.

—¡Señorita, no puede levantarse!.- oi a una enfermera gritar a lo que simplemente ignore.- ¡Llamen a los familiares!.

Miraba todo mi alrededor, caminaba temblorosa, ¿cuanto tiempo había pasado?,¿Qué día es hoy?.
La desesperación aumentaba cada segundo, esto ya lo había vivido y era un sentimiento en el que había tardado en salir,si, no lo exprese pero lo maneje a mi manera.

— ¿____?.- Una voz femenina me saco de mis pensamientos.-¿Enserio Despertaste?.

— ¿Ah?.- me gire a ver de quien se trataba, pero maldije al verla.

— ¡Estas viva!, ¡Es un alivio!.- exclamo alegre.- ¡Pensé que no sobrevivirías!.-

— ¿Por qué no lo iba a estar?.-pregunte algo temerosa.

—¿Oh?.- puso una cara de confusión.- No me digas que...

No dije nada, solo espere a que hablara.

— Pues veras, Haru...

A lo lejos pude ver a una enfermera, tenía la apariencia amable a lo que decidí acercarme para preguntar acerca de mi hermano.

— ¡Hey!.- exclame,ella levantó su vista de su libreta, que al parecer ahí había anotado información sobre pacientes.

—¿Si?.- se sorprendió al verme.-Señorita no debe de estar de pie.

— Me importa una mierda.- dije molesta.-¡Dime donde esta mi hermano!.- me acerque a ella tomandola del cuello.

—¿H-hermano?.- Pregunto algo nerviosa.-

El Tesoro De Mikey; Sano ManjiroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora