en donde Poseidón empezó a tener interés de una extraña Kitsune.
-Historia con capítulos cortos.
-Las imágenes utilizadas tiene sus dueños y yo solo los estoy utilizando por mero entendimiento.
-La historia toca temas delicados, solo que no soy muy...
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Inari caminaba por la orilla del mar que estaba en la jurisdicción de Namazu, la luz de la luna iluminaba la tristeza que se mostraba en su rostro. Había pasado tan solo unos días desde que Kyomi había muerto en manos de la lanza de Poseidon, era algo que jamás olvidaría y se arrepentía en su mente una y otra vez.
Kyomi que era en teoría su nieta aún se encontraba en un ataúd, no la quería enterrarla. Era una lucha constante en ella al igual que las demás de sus Kitsunes que aún no están listas para dejarla ir. Par muchas era su hermana mayor que las guiaba en su rol de sacerdotisa.
Escucho el ruido de algunos cuervos volar detrás de ella, extendió su mano izquierda para que el ave negro posará en su muñeca.
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-¿Quién será el autor de está carta?- se pregunto la Diosa quitando la carta que estaba amarrada en la pata del ave.
La expresión de la Diosa se volvió más oscura cuando el leyó que el autor de la carta, se trataba de cierto Dios Nórdico de cabellos rojos que últimamente iba a su hogar más seguido, sin embargo, no lo dejaba pasar. Miro al cuervo que esté lo miraba con compresión y lástima.
- Dile que aquí lo espero.- comento la Diosa extendió el animal para que saliera volando.
Se acercó al mar y miro su reflejo. Era tan irónico su existencia, era la Diosa que representaba la prosperidad en varios aspectos, pero no podía hacérselo así misma.
¿Cuándo fue que empezó a decaer emocionalmente? Si no mal recordaba fueron tres ocasiones la que la hicieron volverse así. La tercera era la más reciente, la muerte de Kyomi, la segunda fue haber perdido sus primeras Kitsune y parte de su trabajo como Diosa de la agricultura, y el primer puesto fue el día que dejó de creer en el amor y convertirla en la Diosa es ahora.
El día que Thor la dejo plantada en el altar.
Realmente no fue culpa de Thor que la haya dejado en altar, sino que Loki descubrió la relación secreta que tenían y se lo digo a Odin, este hizo casar a su hijo con Sif quien estaba encantada en tomar lazos con el pelirojo. Inari se enteró ya que la noticia de la boda voló por todos pabellones y la única que lloro de sufrimiento fue ella.
