Capitulo 13

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Jamás en su vida Poseidón había corrido tan rápido luego de enterarse de algo. Proteo había llegado con miedo a decirle que Deméter fue al Santuario Narakumi a ver a sus hijos.

Cuando desvío a la lejanía a Deméter y Zeus, no dudo en sacar su arma. Deméter no se quedó atrás ya que invoco un tipo Hoz que normalmente lo utilizaba para su trabajo. Los dos extendieron sus armas, pero unas manos detuvo el posible impacto. Zeus se reía mientras que Poseidón y Deméter se miraban de forma seria.

-Ambos parecen como niños.-hablo Zeus y eso hizo que sus hermanos ahora miren a él.-Sera mejor que dejen su pelea para ocasión.... Sobre todo tu Poseidón Quien saben que es lo que le harán a esa Kitsune.-y con eso Poseidón desapareció su arma y se fue de ahi.-¿En que estabas pensado Deméter?-pregunto mirando a la fémina que avanzo en sentido contrario a la de Poseidón.

-Tu jamás lo entenderías.-fue lo único que dijo la Diosa mientras que Zeus solo negaba con la cabeza.

Poseidón llego corriendo al santuario que dirigía Kyomi, pero se encontró con las Mikos quienes estaban limpiando el lugar. 

- Señor Poseidón, los niños están con la Suma Sacerdotisa Hinoka y la señora Kyomi está en un juicio en el palacio de Izanagi y Inazami.- hablo una Miko que se dio cuenta de la presencia del Dios.

Con esa información se fue de ahí para ir en busca de sus niños. Paso por el bosque Chinju, ya que este sabía las ubicaciones de los otros santuarios gracias a Kyomi, fue entonces que vio a los lejos que Hinoka estaba consolando a una Despena que se encontraba llorando.

- Despena mira, es papá.- hablo Hinoka mirando que llegó Poseidón.

Los hijos del Dios salieron corriendo a su padre en donde se escondieron en los brazos de está ya que se había agachado para recibirlos.

- Papá, todo es mi culpa.- hablo Despena entre lloriqueos.- Si no fuera por qué le dije a Demeter que ya no la vería, todo esto no estuviera pasando.-confeso ocultando su cabeza en el pecho del Dios.

Poseidón no sabía muy bien que hacer, era la primera vez que veía a sus hijos llorar de esa manera. Solo se quedó en silencio mientras acariciaba los cabellos de sus hijos.

- Señora Hinoka.- hablo una Miko llegando al lugar.- acaba de ser citada en la casa de Izanagi y Inazami.-informo llamando la atención de los griegos.

- ¿Cuál es el motivo?- pregunto Hinoka pasando de lado de los Griegos.

- Se va anunciar el castigo de la Suma Sacerdotisa Kyomi por faltarle al respeto a la Diosa Demeter.- anuncio la Miko cerrando los ojos al darse cuentas que esta el tirano.

Los ojos de Poseidón se abrieron al escuchar eso ¿Castigarían a Kyomi solo por qué defendió su territorio y sus hijos? Realmente Deméter pagaría muy caro. Los que estaban alrededor se dieron cuenta de la aura amenazante que salía del rey de los mares.

- ¿Puedo dejarlos aquí por unos minutos?- pregunto Poseidón y Hinoka solo asistió con la cabeza.

- ¿Papá?- Despena miro que su padre les daba un beso en la frente a ambos.

- Vendré dentro de unos minutos.- explico parándose.- iré por Kyomi.-declaro para luego irse.

El Dios camino mientras que Hinoka iba detrás de él y la Miko que llegó se quedó con los niños que se encontraban algo decaídos. Los dos primeros pasaron entre tantos espíritus que vigilaban el lugar que se hicieron bolita al notar la presencia del Dios Griego.

Un gran palacio se ubico al final del camino de los dos. Algunos guardias al ver al Dios no sabían que hacer y entraron en pánico.

- ¿Dónde está Kyomi?- pregunto el Dios haciendo que los guardias se le fuera el alma.

- Es por aquí Dios Poseidón.- hablo Hinoka y el Dios la siguió.

Los dos entraron a una gran sala donde estaban todos los Dioses japoneses, las sumas sacerdotisas y en medio se hallaba Kyomi atada de manos a un palo de madera. Ver a la Kitsune de esa manera solo aumento la irá del Dios.

- ¿Señor Poseidón? ¿Qué hace aquí?- pregunto confundido y asustado Izanagi.

El Dios lo ignoro y ante la mirada de impresión de muchos fue hacia donde se encontraba Kyomi. Pensaron que la iba matar por faltarle al respeto a Deméter, pero este rompió la cuerda que tenía las muñecas de la Kitsune y la cargó de forma nupcial.

- ¿Qué tenían planeado hacer a mi pareja?- cuestionó el Dios de manera sería.

Espera.... ¿Pareja? ¿Acaso Kyomi era pareja del Dios Poseidon?.... Eran las preguntas que se hacían la mayoría de los presentes. Inazami busco la mirada de Inari, pero se sorprendió al ver qué está estaba calmada.

- Teníamos planeado en enviarla por un tiempo a uno de mis templos en el mundo humano.- hablo de forma calmada Inari y hacer que la mayoría la mirara con terror por hablar de esa manera tan calmada al tirano.

Poseidon miro mal a Inari, pero una mano en su mentón hizo que viera a su pareja. La mirada de ella era serena y su mano comenzó acariciar su mentón para que se calmara.

- Está bien, la señora Inari hizo que el castigo no fuera tan descabellado he incluso se ofreció en ocupar mi lugar, pero yo acepte mi castigo.- explico Kyomi con una sonrisa.

El Dios la bajo para luego abrazarla. Para Kyomi era normal este tipo de abrazo cuando está se tenía que ir y el Dios se ponía como un niño que no quería que su madre o padre se fuera. Los presentes miraban la escena con sorpresa.

- No quiero que te vayas.- susurro el Dios haciendo sonreír a la Kitsune.

- El tiempo no es un problema para nosotros.... Volveré.- hablo la Kitsune acariciando la espalda del Dios.

Un carraspeo se escuchó en el lugar haciendo que la pareja se separan. Kyomi fue la única que miro que se trataba de Izanagi.

- Viendo que ustedes tienen algo... Discutiremos en privado lo que pasará....- comento el Dios para pararse de su asiento.- se sabrá dentro de una semana.- fue lo último que dijo para finalizar el juicio.



Tal vez la Kitsune no se iría tan pronto.

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La Suma Sacerdotisa del Tirano (Poseidon x OC) Shuumatsu no ValkyrieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora