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Hyunjin tomó con un poco de gracia la pregunta de Jeongin.
Aunque le causaba un poco de nervios hablar con el pelinegro, simplemente no entendía sus sentimientos.

— Antes vivíamos juntos así que... Seremos compañeros de apartamento. —Sonrió Hyunjin, evitando el tema del chico con orejitas sobresalientes.

El pelinegro ladeó la cabeza, mostrando confusión y después volvió a hablar.

— Pero antes no sabía que te amaba. — Habló muy naturalmente. — Te amo, así que podemos vivir como una pareja. — Volvió a mencionar esa dichosa frase y el rubio nuevamente tenía su rostro de un color muy rojo.

Sí, Jeongin tal vez tenía razón pero el rubio aún no sabía que es lo que sentía realmente por Jeongin o tal vez no lo quería admitir.

— Como sea. Podemos ir buscando un nuevo apartamento. — Intentó quitarle importancia al asunto y Jeongin asintió, muy emocionado de saber que viviría con Hyunjin como en esas series coreanas.

El rubio sacó una tablet dónde comenzó a buscar en una página de internet.
Jeongin solo observaba al chico, en realidad le costaba mucho trabajo entender la tecnología que todas las personas usaban en su vida cotidiana.

— ¿Ahí nos darán un apartamento? — Preguntó con curiosidad y el chico contrario asintió.

— No exactamente, pero podemos buscar los apartamentos en venta. — Explicó Hyunjin con más claridad.

Ambos chicos pusieron atención a esa pantalla que estaba siendo manipulada por Hyunjin que ponía más atención a la cantidad de dinero que pedían por el apartamento.

Mientras deslizaba su dedo por la pantalla, el rubio notaba como el precio de los apartamentos iba incrementando pero aún así no había ninguno de su agrado.
De pronto el dedo de Jeongin detuvo el movimiento de la pantalla.

— Me gusta este. — Habló el pelinegro y después Hyunjin puso atención a esas fotografías que mostraban claramente el interior y exterior de la vivienda.

Sin duda Jeongin tenía un buen ojo para buscar, pues al rubio también le había agradado ese apartamento que tenía un precio accesible.

— Iremos a verlo. — Sonrió el chico y el contrario asintió. — Toma ropa de mi closet. — Ordenó Hyunjin y el pelinegro comenzó a buscar ropa para vestirse mientras que el rubio intentaba desviar la mirada en su tablet para no mirar el cuerpo desnudo del menor.

Ambos chicos salieron de esa casa cuando estuvieron listos y Hyunjin tomó aquel automóvil de su mamá que sin duda no le pediría permiso para usarlo porque no se lo daría.

Los dos chicos subieron al automóvil y en seguida Hyunjin comenzó a conducir.
En el camino, Jeongin puso algunas canciones que le agradaron al instante, aunque solo eran cinco canciones que conocía.

— Cuando compres el apartamento podemos buscar muebles como las parejas casadas, ¿Verdad?

Sí, Jeongin insistía en la idea de ser la pareja romántica de Hyunjin.

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Changbin caminaba de un lado a otro mientras buscaba el control del televisor que Seungmin había perdido en alguna parte de la enorme casa.

— ¿Cómo es posible que no recuerdes donde dejaste el control?, Lo tenías en tus manos hace menos de dos minutos. — Se quejaba el pelinegro mientras que Seungmin solo intentaba hacer memoria y recordar dónde había dejado ese objeto.

— No es mi culpa, solo tengo muy mala memoria. — Volvía a decir. — Felix llegará aquí en unos minutos, tú solo dile que eres un buen amigo mío. — Dijo Seungmin y Changbin solo asintió, un poco disgustado por la petición del otro chico.

HyunJin's puppy «ʜʏᴜɴ ɪɴ»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora