Capítulo 35

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Adriana

Subí a mi habitación mientras el terminaba de preparar la cena, cogí una mochila y la llené con las cosas que me iba a poner para salir.

-¡Adri! -lo escuché acercarse y escondí rápidamente la bolsa bajo la cama.

-Dime -respondí sonriendo en el suelo.

-¿Qué haces ahí?

-He perdido un pendiente.

-Si no llevabas ninguno - respondió y caí en la cuenta de que no me había puesto...

-Se cayó de una cajita al abrirla. ¿Qué querías?

-Se va a enfriar la cena - me puse en pie, pasé por su lado y le di un beso en la mejilla.

-Pues vamos -cogí su mano y cerré la puerta.

Terminamos de cenar, vimos un rato un programa que pasaba por la televisión y poco después hice que me estaba quedando dormida en el sofá.

-Adri -tocó mi brazo y murmuré-. Te estás quedando dormida. ¿Quieres ir a la cama? -Asentí con los ojos medio cerrados.

-Voy a fregar los platos -dije mientras me incorporaba.

-Mañana lo hacemos, vamos.

-Tu puedes quedarte viendo la tele.

-No, estoy un poco cansado también. -Me estaba saliendo redondo el plan. No se me daría bien mentir pero ¿actuar? parecía ser que sí.

Estuvimos hablando un poco hasta que sus parpados comenzaron a caer, dejó de acariciarme y lo acaricié yo para asegurarme que se quedaba profundo. Avisé a Olivia para decirle que estaba dormido y que en nada bajaba, me levanté de la cama sin hacer ruido, le puse una almohada en su brazo, cogí las cosas y salí silenciosamente. Posiblemente se despertaría, siempre lo hacía, solía ser sobre las seis, lo sabía porque se quedaba mirándome mientras "dormía". Por eso lo tenía todo planeado, llegaría a las cinco y media y me volvería a acostar, no tenía porque darse cuenta ¿no?.

Decidí vestirme en la cocina antes de salir así solo tendría que maquillarme y los tacones me los pondría cuando llegáramos.

-Adri ¿ha sido difícil? -me preguntó en voz baja fuera del coche.

-No -sonreí y nos subimos juntas en la parte de atrás para ayudarme con las pinturas.

-Buenas noches Adri -me saludó Bran.

-Hola guapo.

-Vaya gracias -me sonrió- ¿Y Ficher? -preguntó y empecé a ponerme nerviosa.

-No se encontraba muy bien... mentí.

-Pero si hablé antes con él y estaba estupendamente.

-La cena le sentó un poco mal.

-¿Y te ha dejado venir sola? -siguió preguntando.

-Sola... Técnicamente sola no porque voy con vosotros, se fía de ti.

-Si cariño va con nosotras, arranca ya. -Le pidió mi amiga y nos fuimos.

-¿Estás segura de que no le dirá nada? -le susurré al oído.

-No creo...

-¿Crees? -dije un poco más alto.

-Tshhh , no sé para que le va a decir nada le estamos dando nuestra palabra ¿no?

-Como para fiarse alguien... -dije.

- Que poca fe tienes en nosotras -dijo y reímos.

Las calles de Venice estaban repletas, algo normal siendo sábado, aparcamos en una especie de descampado en la playa y caminamos cinco minutos hasta un local llamado TEDDY'S. Había una cola larguísima que daba la vuelta a casi toda la manzana y dudaba que fuéramos a entrar esa noche.

¿Puedo besarte?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora