Zach.
No sabía cuánto tiempo había transcurrido desde que me sacaron de aquella habitación, pero cada segundo se me hacía más y más lento. Me sentía herido, vacío, como si una bala me hubiese traspasado el pecho y se hubiese llevado consigo mi corazón.
Veía pasar frente a mí a enfermeras, doctores, pacientes que estaban internados en el hospital, al personal de limpieza, escuchaba voces a mi alrededor, ruidos lejanos que provenían del interior de la puerta roja al final del pasillo, aquella que decía en letras plateadas: EMERGENCIAS.
Me había quedado en la sala de espera atento a cualquier información que pudieran darme, estaba muy nervioso, me temblaban las manos y me sentía muy ansioso, no podía mantenerme tranquilo, no podía controlar mi angustia, simplemente se me hacía imposible.
Alguien se sentó a mi lado, yo tenía la mirada fija en el piso, pero me di cuenta que se trataba de mi tío enseguida, no necesitaba decir nada para que lo reconociera.
Él me había apoyado en mis peores momentos, después de lo ocurrido con Emma no tuve el apoyo de mis padres para salir adelante, fue mi tío quien me apoyó emocionalmente, y aunque nunca se lo había dicho, estaba muy agradecido con él, ha sido el único que siempre se ha preocupado y ocupado de mí.
—¿Ya te sientes mejor? —me preguntó él para romper el silencio.
—No lo sé —le respondí en voz baja sintiendo un nudo en la garganta.
—Ella se pondrá mejor, estará bien —dijo tranquilamente intentando reconfortarme.
—¿En verdad eso es lo que crees? ¿después de lo que acaba de pasar me dices que ella estará bien? No soy idiota para creerme eso, no pienso volver a engañarme con esa mentira, nada va a estar bien —se me quebró la voz a la mitad de la última palabra—. La perdí —murmuré al mismo tiempo que se me nublaba la vista y se deslizaban lágrimas bajo mis párpados—. Voy a perderla —cerré los ojos con fuerza y tomé una respiración profunda.
No conseguía quitarme de la cabeza la imagen de Melodie recostada en esa camilla, conectada a esos aparatos, inconsciente y herida, perdiendo la vida.
—No digas eso Zach, afortunadamente lograron estabilizarla, los médicos dijeron que... —lo interrumpí con la voz ronca limpiándome las lágrimas con el dorso de la mano.
—Eso fue lo que nos dijeron, ¿hace cuánto? ¿tres, cuatro horas? ¿Y que nos dirán después? Acababan de decir que se encontraba estable y de la nada dejó de respirar. No quiero estar aquí, quiero estar con ella, pero... estuve a punto de... en ese momento me sentí del mismo modo que aquel día, la misma angustia, la misma sensación de dolor, la misma desesperación y frustración de no poder hacer nada al respecto, así me sentí cuando la vi allí, volví a recordar el día que perdí a Emma y ahora siento que... todo se está derrumbando otra vez, por culpa mía.
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Perdiéndonos
RomanceAl conocerlo él me envolvió en su penumbra, yo ilumine su camino y nos sumergimos juntos en el limbo de la perdición. Él y yo, somos luz en la oscuridad. ♡♡♡♡ Hayley Melodie es una chica que ve más allá del bien y d...