CAP 47 - Ya no te quiero

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Estacionas tu carro en la UA, te detienes un momento a pensar en lo que acaba de pasar, pones ambas manos sobre tu rostro y das un suspiro profundo, tomas tu cartera y sales del carro, caminas hacia la salida del estacionamiento pero alguien te alcanza con pasos acelerados, temes voltear a ver quien es y antes de que puedas ver de quién se trata te toma del hombro con suavidad.

—Hola —Te dice. Es Aizawa.

—Hola, ¿Qué tal? —no sabes que decir.

—Es algo tarde, no es común en ti llegar a esta hora —Suena calmado.

—Fui a otro lado y con el tráfico se me hizo tarde... Necesito un café —Dices eso último en voz baja.

—¿Irás a la cafetería? Te acompaño. —Se ofrece.

—No sé si eso sea una buena idea, será mejor que...

—Quiero hacerlo —Se adelanta a ti.

No dices nada, solo sigue al mismo ritmo de tus pasos, puede que sus ojos ya no reflejen lo que antes significaban para ti, pero aún ahora, todavía sientes escalofríos al tenerlo cerca, y estando así con él caminando juntos sientes como si estuvieras traicionando a Emi.

—Yo... —Dices—. Supe que quieres intentarlo con Emi, de nuevo.

—Eso... —Se queda en silencio—, es complicado.

—Entiendo —Tomas tu café—, me tengo que ir, cuídate.

—Espera... —Te detiene—, tú... y yo... ¿podríamos hablar más tarde?

—No hay nada que tengamos que hablar.

—Sabes que sí, y mucho —Es firme.

—Bien... Si es tan importante para ti...

—Te espero en el café de gatos.

Da la vuelta y se aleja rumbo a uno de los salones, ingresas a tu oficina y no sales por el resto del día, encontrarte con Mic puede resultar muy incómodo, así que para evitar verlo permaneces dentro.

El sol ya se está ocultando y te diriges al café de gatos tal como lo dijo Aizawa, pero no te dio una hora exacta, por las vacaciones de invierno de los estudiantes es muy probable que él haya salido de las instalaciones mucho antes que tú, así que hay una posibilidad muy alta de que ya esté esperando.

Llegas al estacionamiento sin muchos problemas, una vez ahí, revisas tu carro buscando encontrar el rastreador que dijo haber puesto Atsuhiro, pero nada, sea donde lo haya escondido, no logras encontrarlo, resignada subes al asiento piloto y te pones en marcha.

Fuera del café está el carro de Aizawa, como lo sospechaste, ya está ahí, dejas tu carro justo detrás y tiemblas un poco al quitar la llave, dudas un poco en entrar, pero si hay algo que quiera decirte te intriga saber de que se trata, sales con calma y entras al establecimiento.

—Llegaste —Dice a lo lejos, se encuentra en la misma mesa de siempre acariciando a uno de los gatos.

—No me diste una hora exacta así que vine apenas salí, no sé cuánto tiempo estuviste esperando —Dices acercándote despacio.

—No te preocupes, no fue mucho —Sonríe ligeramente.

Las veces que venías a ese lugar junto a él siempre solías sentarte justo a su lado, en aquel sillón cómodo, hay un espacio ahí pero ahora no quieres ni puedes, te diriges al asiento frente a él, te mira con algo de sorpresa pero lo disimula bajando la mirada.

—Bien, ya estoy aquí ¿Qué quieres decirme?

—¿No quieres pedir algo antes? —Dice intentando sonar lo más amable posible, puede que esa sea la conversación más tranquila que tienen desde que pasó lo de Emi.

MY FUCKING ADDICTION - Present Mic, Mr. Compress, Aizawa y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora