CAP 59 - Aléjate de ella

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Despiertas a la mañana siguiente con un dolor de cabeza terrible, tu rostro está escondido debajo de la sábanas, pero apenas tus ojos se abren sabes que no estás en tu departamento, la suavidad de esas sábanas no era la tuya, y el olor tampoco, "¿Dónde estoy?" piensas, retiras la sábana de tu rostro con temor de lo que puedas ver, la luz se filtra intensamente por la ventana, el sol ya ha salido, llevas un polo encima que no recuerdas haberte puesto, observas los cuadros colgados en las paredes y deduces en dónde estás.

Tu respiración comienza a agitarse al pensar en todos los posibles escenarios que te llevaron ahí "¿Qué pasó anoche? ¿No dormimos juntos verdad? ¿ Por qué tengo su ropa puesta? ¿Traicioné a Ats?" miles de preguntas comienzan a torturarte, te levantas de la cama a toda prisa, la resaca parece desaparecer por lo nerviosa que te encuentras, pero lo más importante es que no tienes respuesta a ninguna de tus preguntas, no lo recuerdas.

Caminas alrededor de la habitación y no hay algún indicio de que haya pasado algo la noche anterior, todo parece estar... en su lugar, buscas tu cartera pero no está, puede que esté en la sala de estar de Mic, pero te da miedo salir de esas cuatro paredes, tienes miedo a enfrentar la verdad de lo que pasó, porque después de todo, Mic es el único que puede darte respuestas.

Luego de varios minutos tomas el valor para salir de ahí, pones tu mano sobre el pomo de la cerradura, giras despacio, pero la puerta se abre antes de que puedas terminar tu acción.

—Despertaste —Sonríe Mic al verte.

Está a menos de un metro de distancia de ti, no sabes que decirle, te quedas en silencio varios segundos...

—¿Estas bien Honey? —Pregunta preocupado—, preparé el desayuno, baja para que puedas comer.

Toma tu mano con suavidad y te guía por las escaleras, no sabes que hacer ni que decirle, llegan hasta la cocina y te ofrece una aspirina con un vaso de agua para calmar tu dolor de cabeza.

—Mic... —Dices al fin.

—Dime.

—Sé que es raro lo que voy a decirte —Dices mientras metes la aspirina en tu boca y bebes agua—, ¿Que... Qué pasó ayer?

Mic se asombra al escuchar tu pregunta, sonríe ligeramente y se acerca dos pasos a ti.

—¿No lo recuerdas?

—Yo... lo último que sé es que estaba en en un bar bebiendo sola, no recuerdo haberme encontrado contigo.

—Te embriagaste y luego me llamaste para que te recogiera.

—¿Yo te llamé?

—Sí, no podías hablar muy bien, fue el bartender quien me explicó la situación y vine por ti —Dice calmado.

—Mic... ¿Tú y yo... anoche... tuvimos...

—No —Te interrumpe—, Si eso es lo que te preocupa, no pasó nada.

Suspiras de alivio al escucharlo, él nota que escuchar su respuesta te hace feliz, "¿A quién protege?" Se cuestiona "¿No recuerda todo lo que me dijo ayer?".

—Menos mal... Yo...

—No soy tan idiota para acostarme contigo sabiendo que estás totalmente ebria —Interrumpe de nuevo—, no sé quien crees que soy para siquiera pensar que pasó algo estando tú en ese estado —Parece un poco molesto—. Sé que nos acostamos antes mientras bebíamos, pero fue diferente, lo sabes, tú estabas consciente igual que yo, pero ayer Honey... No estabas consciente de lo que hacías y que tú creas que yo...

—Perdón Mic, es que...

—Si viniste aquí fue porque no llevabas tu tarjeta de acceso y menos tus llaves, no iba dejar que durmieras en la calle, te presté ese polo porque no quería que dañaras tu vestido, que por cierto está en ese sillón —Señala—, y si también te lo estabas preguntando, yo no te lo puse, lo hiciste tú misma, fui yo quien puso los límites ayer Honey...

MY FUCKING ADDICTION - Present Mic, Mr. Compress, Aizawa y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora