CAP 35 - Me equivoqué

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—No no, estoy bien, es solo que... no sabía que Aizawa estuviera saliendo con alguien.

Das un sorbo a tu bebida intentando ocultar tu impresión, ella te mira con curiosidad, quizá porque sabe que estas mintiendo al respecto o alguna otra razón que pasa por su mente.

—Bueno, no es nada formal... tampoco es que lo hayamos dicho explícitamente, Aizawa es de pocas palabras —Sonríe—. Pero pienso que está sobrentendido.

Sus palabras calman un poco tu corazón, no estaba dicho... quizá ella malinterpretó todo y cree que están saliendo pero en realidad no es así, intentas sacar más información.

—¿Por qué piensas que está sobreentendido? —Dices.

—Verás... A mi siempre me ha interesado, pero... yo pensé que él no tenía interés en mí, aun así no me rendí, entrenábamos juntos... nos dábamos consejos sobre cómo mejorar el potencial de nuestros estudiantes... y con el tiempo su trato hacía mi fue cambiando... Un día cuando me acompañó a casa... simplemente sucedió.

Supiste a que se refería, cuenta la historia con un tono alegre, su rostro se ilumina al decir su nombre, sientes algo de envidia, tú quizá no te ves así cuando lo mencionas, pero ella... ella está enamorada.

—Pensé que eso cambiaría la relación de amigos que llevábamos, pero no fue así... seguimos como siempre, en algún momento llegué a pensar que la relación que teníamos era más la de unos amigos con derecho, y cuando se lo dije, él simplemente dijo "tú significas para mí mucho más que eso" y hemos seguido así hasta ahora.

Con esas palabras te queda claro que ellos siguen en algo, algo que jamás mencionó, algo que te ocultó, quieres decirle lo que está pasando, pero su rostro refleja amor, sientes culpa...

—Él... ¿Nunca se fijó en nadie más?

—No lo sé... tampoco me siento con el derecho de preguntárselo, es decir, no tenemos nada formal... —Da un sorbo a su vaso—. Sabes, en estos últimos meses se ha portado algo distante, pero... es gracioso que siempre lo hayamos solucionado en...

—Disculpa que te interrumpa, pero me tengo que ir —No puedes seguir escuchando—. Olvidé que tenía que ir a otro lado... —Miras tu celular disimulando—. Me están esperando... lo lamento mucho, me gustaría seguir oyendo tu historia otro día —Dejas unos billetes en la mesa—. Yo pago hoy, puedes quedarte un rato más si quieres...

—Eres muy amable, pero no necesitas pagar todo, yo estaría encan...

—Quiero invitar, no hay problema —Finges una sonrisa—. Nos vemos luego...

Sales a prisa del establecimiento, lágrimas mojan tus mejillas y el frío impacta con ellas congelando tu rostro, sigues caminando ignorando todo tu alrededor y los copos de nieve que caen sobre tu cabello... confiaste, confiaste y te fallaron, te mintieron otra vez... una vez más se repite todo, pero esta vez duele más, duele porque pensaste que habías tomado la mejor decisión, duele porque tus sentimientos hacía él se hacían más fuertes, duele porque te habías formado una idea completamente equivocada, pero hoy... pero hoy todo parece derrumbarse.

Sin darte cuenta tus pasos te llevan a la casa de tu mejor amigo, tocas el timbre y él abre de inmediato, estás temblando de frío y tu ropa está casi empapada.

—¿Qué pasó? —Limpia tus lagrimas y te abraza—. Respira... calma... ya estás aquí

Su abrazo es reconfortante, pero en lugar de hacerte sentir calma, solo hace que quieras desahogarte más, él se queda en silencio y te envuelve en su calor intentando darte tranquilidad mientras con una mano va quitando la nieve de tu pelo.

MY FUCKING ADDICTION - Present Mic, Mr. Compress, Aizawa y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora