MY FUCKING ADDICTION - Present Mic, Mr. Compress, Aizawa y tú

CAP 01 - El día que nos conocimos

Desde que eres pequeña has tenido una gran afición por la música siempre soñaste en convertirte en músico y vivir de aquello que amas pero tus padres nunca te apoyaron, razón por la cual has tenido que trabajar en grandes compañías y oficinas, eso te ha llevado a usar ropa formal todo el tiempo, lo cual no te disgusta puesto que tu estilo es muy bueno y tus amigos y amigas siempre te elogian por eso, además que eres atractiva según la gente que te rodea y a pesar de que muchos chicos han querido estar contigo de una forma romántica no has logrado tener conexión con ninguno de ellos.

Uno de esos días, cuando salías con unos papeles del edificio en el que trabajas te detienes a tomar un café por el cansancio. Mientras esperas a que traigan tu taza se te acerca alguien repentinamente.

—Hola. Disculpa, ¿podría acompañarla en esta mesa? es que todo está muy lleno y no hay lugares disponibles —Dijo con un tono amable.

Giraste la mirada para ver de quien se trataba aunque por el tono de su tono de voz podías inferirlo, estabas en lo correcto... Present Mic, un héroe reconocido en la ciudad, tenía un mayor significado para ti, pues él había salvado a tu familia de unos villanos hace algunos años atrás. 

—Hola —Dijiste tratando de ocultar la emoción que sentías por dentro—. Si no hay problema, hay una silla extra ahí —Sonríes de forma amable.

—¡Thank you so much! No quería incomodarte, ¿cómo te llamas? vengo muy seguido aquí y es la primera vez que te veo. 

El tono de su voz es enérgico, cuando lo veías en televisión era igual, eso confirmaba que incluso en persona mantenía la misma esencia, su actitud te intriga y tienes más interés en conocerlo.

—Sí, no vengo aquí muy seguido, me detuve a tomar algo porque tenía tiempo libre. Mi nombre es _____ y tú eres... Present Mic ¿verdad?

—Veo que ya me conoces, imagino que por la televisión y eso, ser héroe no te da mucha privacidad que digamos. —Sonríe ligeramente y continúa— También soy profesor en la UA, ¿Tú debes trabajar en la compañía de alguno de esos edificios verdad?.

—Si, trabajo ahí —Dices señalando uno de los edificios, el más grande— ¿cómo lo supiste?

—Pues, la ropa que llevas te delata, se nota que trabajas en una oficina —Te mira a los ojos como si quisiera descubrir más de ti— «de hecho, esa ropa le queda muy bien» —Piensa.

—Oh cierto, es verdad... bueno tengo algo de prisa, me tengo que ir, me gustó hablar contigo. Fue un gusto, gracias por la charla.

«no puedo dejar que se vaya, al menos debo pedirle su número» —Wait a minute! ¡Espera! Mmm me preguntaba si podrías darme tu número, no sé, bueno solo si quieres, no quiero obligarte ni nada.

—Claro, no hay problema, ¡llámame cuando gustes! —Anotas tu número en su móvil y se lo devuelves gentilmente.

—¡Gracias! Te llamo más tarde —Se acerca a ti y te da un suave beso en la mano—. Me encantó conocerte

—Si bueno, me voy, cuídate. —Te sonrojas, desvías la mirada y sales tan rápido como puedes.

Terminaste tus labores en la oficina, agarras tu laptop y te diriges a tu departamento a descansar, es fin de semana y tus amigos quieren ir a tomar algo, pero en verdad estás agotada y prefieres ir a dormir así que te niegas. Llegas a tu sala de estar, te tumbas en el sofá pero tu celular suena.

—¡Hi girl! Soy Mic, ¿te acuerdas de mi verdad? Nos vimos hoy. Me preguntaba si podías salir, es fin de semana y es bueno relajarnos un poco, ¿qué dices?

—Hola Mic, tuve un día agotador no sé si tenga las energías para salir ahora —Dices tratando de sonar lo más cansada que puedes—. creo que tendré que recha...