MY FUCKING ADDICTION - Present Mic, Mr. Compress, Aizawa y tú

CAP 61 - Nunca vas a olvidarme (+18)

Su beso es apasionado sin perder el ritmo, casi sientes que tu respiración se ahoga pero no lo detienes.

—¿Pasó algo? Estás muy feliz —Dices sonriendo.

—¿Y por qué no estarlo? pasado mañana nos vamos de aquí, tú y yo... Solos. —Responde emocionado.

—Es verdad, falta muy poco, mira —Le entregas un papel escrito.

—¿Qué es?

—La dirección de nuestro nuevo departamento, he estado muy atareada tratando de tener todo en orden cuando lleguemos, hice las negociaciones por video llamadas y ya es nuestro, el contrato de alquiler es por un año, pero podemos renovarlo, vas a amarlo, tiene una vista preciosa cerca al mar, parece un sueño... —Dices con emoción y él sonríe al verte—, Ya está amoblado, las fotos que me enviaron son grandiosas, ya quiero que...

Toma tus mejillas con suavidad y te besa de nuevo.

—Lo siento, no quería interrumpirte, pero es que... Verte así de emocionada hace que no pueda resistirme a ti.

—¿No te da miedo que alguien entre?

—Nadie va entrar —Dice seguro.

Con la mano en la parte baja de tu espalda, presiona sus labios contra el costado de tu cuello y susurra.

—No sé si pueda esperar un segundo más, quiero, tengo que tenerte ahora.

—Estamos en la UA, sabes el escándalo que se armaría si alguien nos ve.

—No me interesa, igual ya presenté mi carta de renuncia hoy. —Sonríe.

—Igual no es buena idea, es una escuela... Hay estudiantes...

—Que acaso Eraserhead nunca...

—¿Mmm? —Lo miras confundida

—Nada —Ríe para sí mismo—, Sí que es un idiota.

Retrocede unos pasos, toma la manecilla de la entrada del salón de gimnasia y le pone seguro, regresa a ti deslizando sus manos por tu suave mejilla y reclama tu boca nuevamente, baja por el costado de tu cuello y se detiene por encima de tu escote. Arrastra las yemas de sus dedos hacia abajo recorriendo tu muslo, tira del dobladillo de tu falda. levantándolo más y más hasta que encuentra el borde de encaje de tus bragas.

—Es una locura —Susurras sin aliento—, ¿Aquí mismo? ¿Ahora mismo?

—Tardaremos treinta minutos en llegar al restaurante, serán otros cuarenta hasta que terminemos de comer. Según mi cuenta, es más de una hora hasta que lleguemos a tu departamento y honestamente no sé si pueda esperar tanto.

Te sienta sobre varias colchonetas, quita tu blazer dejándolo a un lado, se quita el saco y todo en ti tiembla.

—Las ventanas tienen cortinas largas, lo suficiente para que nadie nos vea, y mientras no hagamos tanto ruido —Susurra—, deberíamos estar bien.

—¿Aquí? —Tus ojos se agrandan cuando pasa su dedo por el interior de tu pierna, deteniéndose para empujar tus bragas a un lado. Muerdes tu labio inconscientemente echando la cabeza hacía atrás mientras se frota contra ti.

—Eres tan perfecta... —Jadea cerca a tus labios.

Con sus manos en tus muslos, te acerca más a él, lo rodeas con tus piernas, meciéndote contra él hasta que se acomodan en un ritmo juguetón.

—Más despacio —Susurra contra tu piel cálida.

—Pero es que... se siente tan malditamente bien —Haces una mueca exhalando con fuerza.