Amor en el mapa #1

12. Amanecer

Septiembre 13, 1976

Colegio Hogwarts de magia y hechicería

Lucius había pasado gran parte de su vida acudiendo a fiestas y galas que su familia hacía o a las que los invitaban pero siempre tenía reglas para eso.

1. No tomar más de una copa de champagne o whisky.

2. No crear problemas que puedan dejar en ridículo a la familia.

Y había muchas más pero Lucius siempre recordaba la más importante "No olvides que eres un Malfoy" se la repetían tanto que había quedado grabada en su memoria para siempre; podría estar lejos de su casa o de su padre pero su mente lo mantenía en esa cárcel pero esa noche había hecho todo lo prohibido.

Había pasado un buen rato bebiendo y hablando con Severus hasta que el alcohol les gano a ambos haciéndolos bailar bastante juntos durante buen rato. No estaba seguro de que eso fuera parte de las reglas pero estaba claro que si su padre se enterará haría una absurda regla para no bailar con mestizos.

Lucius no logró esconder la sonrisa que le apareció en el rostro al pensar en esa tontería aunque en el fondo sabía que eso podía suceder. Un pequeño temblor recorrió su cuerpo al imaginar eso, no quería que lo alejaran de Sev y menos ahora que estaba tan seguro de querer decirle cuánto lo quería.

—¿Lu? ¿Te encuentras bien? —preguntó Sev a su lado, se habían quedado en una esquina después de bailar un largo rato.

Observo cada detalle de Severus queriendo mantener esa imagen para poder recordarlo siempre porque se veía tan lindo y supuso se veía así después de otras cosas. Su cabello estaba ligeramente revuelto, su mirada brillaba un poco y su piel, que siempre parecía pálida y enfermiza, en ese momento se veía sonrojada y llena de vida.

—Todo excelente Sev, solo me quede pensando eso es todo.

—De acuerdo —asintió sonriendo levemente.

Lucius no pudo evitar embobarse un poco por esa sonrisa, le encantaba ver cada que Severus sonreía porque por un segundo parecía lo suficientemente feliz para bajar todas sus defensas y dejar ver lo que sentía.

—Tal vez deberíamos ir a dormir Sev —dijo Lucius mirándolo.

—No quiero, si dormimos se acaba esto y no quiero perderte —murmuró Sev abrazándose al brazo de su amigo.

Lucius mordió su labio al oír eso y sonrió por lo que dijo Severus.

—No me perderás, Sevy.

—¿Estás seguro?

—Muy seguro —asintió sonriendo.

Severus estaba por caminar cuando se detuvo de pronto con el rostro serio.

—Pero quiero ver algo bonito.

—¿Además de mi? —preguntó Lucius sonriendo arrogante.

—Bobo —dijo pero rió divertido.

—Ya en serio ¿qué quieres ver?

Se quedó callado un rato antes de sonreír un poco y señalar la ventana hacía el cielo nocturno.

—El amanecer, veamos el amanecer juntos Lu.

—De acuerdo pero no quiero que nos sintamos mal así que espera un momento —Lucius buscó a su alrededor. En realidad no había nadie a quien pudiera pedirle que se quedará con Severus pero temía dejarlo solo.

Entonces notó a Zaid Zabini, un chico moreno, alto y bastante más amigable que la mayoría de Slytherins. Era de su mismo curso y no era tan cercano a sus propios compañeros de cuarto así que al menos podía confiar lo suficiente para pedirle que se quedará unos minutos con Severus.