7. Amigos

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Septiembre 9, 1976

Colegio Hogwarts de magia y hechicería

—Listo Peter, tu herida ya está curada por completo así que puedes volver a cocinar pero con cuidado. —Madame Pomfrey estaba guardando unas cosas después de haber revisado por última vez la mano de Peter.

Habían pasado 7 días desde el incidente en las cocinas con Barty, en esos últimos 7 días el Slytherin lo había estado viendo por lo menos una vez al día para asegurarse de que estuviera bien y que no tuviera algún problema para seguir con su vida por el dolor.

—Gracias Poppy —dijo Peter sonriendo alegre—. Nos vemos.

Tras despedirse salió de la enfermería emocionado de poder volver a la cocina aunque en ese momento no tenía muchas ganas de ir. Más bien no tenía ganas de nada, tenía algunas tareas que le habían dejado ese día en clases pero no se sentía con la suficiente voluntad para intentar hacerlas.

Muchas veces prefería hacerlas cuando alguno de sus amigos la hacía porque así al menos no se sentía tan idiota como siempre. Desde que tenía memoría le decían que tenía que cuidar lo que hacía porque siempre lo terminaba arruinando por ser muy tonto; no importaba que fuera, hasta las cosas más simples las podía arruinar.

Peter suspiro hondo y siguió caminando, por eso odiaba estar solo por mucho tiempo, los pensamientos feos llegaban como una tormenta y en ocasiones no los podía detener así que terminaba en la cocina comiendo demasiado porque era lo único que lo calmaba.

Intentando que los pensamientos no lo hicieran sentir mal caminó; sabía que James seguramente estaba preparándose para entrenar porque no le gustaba pasar mucho sin ejercitarse, Remus seguro estaba leyendo o con Lily y Sirius a lo mejor andaba por su habitación.

Miró a su alrededor jugando con sus dedos, también podía buscar a Barty; no eran amigos (al menos eso creía) así que no se sentía con la confianza para ir a hablar con él de la nada. Estaba teniendo un debate completo en su cabeza sobre si debía ir o no a buscarlo, terminó pensando que era la única persona con la que podría estar.

***

Después de un rato buscando a Barty por el castillo lo encontró sentado en el césped cerca de la sombra de un árbol. Parecía estar dormido, con los brazos bajo la cabeza, los ojos cerrados y las piernas apoyadas y, Peter habría creído que dormía de no ser porque cuando se acercó los ojos de Barty se abrieron y lo miraron.

—Peter, hola. —La mirada pasó de ser fría a una más amable en cuestión de segundos.

—Hola Barty, yo eh lamento molestarte —comenzó a hablar un poco nervioso—. Sí podía pasar un rato aquí contigo...

Sabía que su volumen de voz había ido disminuyendo con cada letra que había pronunciado ante el contrario.

—Dijiste que querías quedarte ¿verdad?

Peter asintió despacio.

—Claro Pet, no tenías ni que preguntarlo, anda siéntate.

Una leve sonrisa apareció en el rostro de Peter mientras se acomodaba frente a él bajo la sombra del árbol. Barty le sonrió tranquilo jugando con su varita de forma despreocupada.

—¿Y tus amigos?

—James entrenando, Remus seguramente leyendo y Sirius no sé.

—Es raro que no estén juntos cada momento del día.

—Sí muy extraño —murmuró suspirando.

Barty lo observó atento pero no dijo nada sobre eso.

—Veo que ya te quitaron las vendas, me alegra que estés bien, aún me asustaba que te doliera.

Amor en el mapa #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora