Amor en el mapa #1

36. Ambiente navideño

/Por favor lean la nota al final/

Diciembre 24, 1976

Mansión Potter

—Sigo sorprendido de que estén aquí —dijo Remus sentado en el sofá de la mansión Potter.

—Nosotros también —admitió Lucius junto a Severus.

James había logrado convencer a todos los de Slytherin de pasar Navidad y Año nuevo en su casa así que los 8 habían llegado a la mansión de la familia Potter el día 18 de diciembre. Los padres de James, Euphemia y Fleamont, los habían recibido con amabilidad aunque no dejaron de mostrarse sorprendidos ante las nuevas amistades de su hijo y su grupo de amigos.

—Vamos, ya han pasado unos días, no debe ser tan raro —dijo Sirius llegando con dos tazas de chocolate caliente—. James trae más tazas en un momento.

Remus asintió tomando una de las tazas y pasándole una a Sev.

—¿Mia sigue con Reg? —preguntó Sev tomando su taza.

—Sí, parece que ella y él se entienden bien —comentó Sirius con un puchero.

—¡Ya te cambiaron! —cantarreó James divertido llegando con las tazas faltantes.

—No me simpatizas —susurró Sirius sacándole la lengua.

—Me amas prongs.

Sirius iba a negar cuando vio a Reg regresar de la cocina comiendo una galleta de jengibre hecha por Mia.

—Esto es lo más rico que he comido —dijo entre mordidas.

—Eso es muy halagador Reggie aunque no creo que sea para tanto —dijo Mia saliendo tras él.

—Mia, eres la mejor cocinando así que mi hermanito tiene razón —intervino Sirius sonriendo alegre.

Mia sonrió con ternura y besó la frente de Sirius y Regulus, eso era algo que hacía siempre con James, los dos hermanos sonrieron por eso sabiendo que era algo que no pasaría en su casa.

—Espero que todos se vean muy bien para la cena de esta noche —dijo mirando a todos con calma.

Los 8 chicos asintieron con emoción, todos esperaban la cena por distintas razones pero deseaban vivir esa noche para guardar el recuerdo en su memoría.

***

Frente al espejo del baño Lucius acomodaba su ropa y su cabello, estar en la casa de James lo hacía sentir un tanto extraño; nada era como en su casa, no había ese ambiente lleno de tensión sabiendo que pronto empezaría una fiesta enorme con mucha gente y todo lleno de personas que se odian entre sí pero no lo dirían de frente jamás.

Ahí en la mansión todo era distinto, para empezar Mia y Mont los habían recibido con mucha alegría en su casa parecían ser sinceros con su emoción de tener a tanto adolescente cerca durante navidad; luego todo el lugar estaba decorado con esmero, se sentía un enorme espíritu navideño y para terminar Mia había estado al pendiente de ellos para saber como estaban, que querían de cenar y hasta había estado preparando las habitaciones con cosas que James le había dicho sobre los nuevos amigos que tenía.

—¿Lu? ¿Estás listo? —preguntó Sev desde la habitación.

—Si, ya salgo, solo un minuto Sevy.

Escuchó la respuesta de su novio y sonrió para revisar por décima vez su aspecto, no había ni un solo defecto en cómo se veía. Antes de salir se aseguró de esconder bien la última carta de sus padres que habían mandado la noche de su llegada a la casa, no dejaba de sentirse nervioso de que sus padres se enterarán de donde estaba o con quienes estaba, pensaba que había logrado convencerlos de que había decidido quedarse en Hogwarts pero no dejaba de temer.