¿Porqué últimamente los días pasaban más rápido que antes?, por lo menos todo lo que respectaba a la unión estaba calmado.. políticamente hablando, ya que sabía que estaban asesinando a mucha gente opositora aunque el gobierno humano intentara escondérselo, pero no podía hacer nada de todas maneras.
-Aún no puedes aguantar tu propio peso sobre tus brazos, no seas terco Rusia -Resopló observando como el mencionado soltaba un sonido de enojo tras volver a caer de cara contra la almohada frente a él cuando intentaba subirla gateando, pero aún estaba muy pequeño como para aguantar mucho tiempo-.
La puerta se abrió de repente de manera cuidadosa dando paso a una hermosa mujer algo más joven que el carmesí, la República Socialista Soviética de Bielorrusia entró sonriendo con una canasta de peras suaves y dulces que fue a buscar para prepararle su primera comida casi sólida al pequeño eslavo.
-Llegaste más temprano de lo que pensé -URRS alzó una ceja viéndola caminar tan en confianza por su casa luego de haber entrado a su casa sin tocar al menos la puerta, esa mujer no tenía remedio pero al menos tenía un poco más de respeto que su hermana-.
-Cuando algo realmente me interesa tengo tiempo libre. -La de piel verde dejó su canasta sobre la mesa para ir a tomar en brazos al bebé, era la primera vez que veía a uno country así que estaba emocionada y casi se derrite cuando el otro le sonrió amigable-.
Al más alto le tembló una ceja cuando notó lo que realmente quería decir, no era una impuntual.. simplemente no le daba la maldita gana de asistir a las horas que se acordaban para reuniones, tuvo que suspirar profundamente para no soltar algún comentario grosero. Así que la siguió hasta la cocina por observar cómo hacía la dichosa papilla de fruta mientras le hablaba al niño que sostenía en su brazo izquierdo, el ruso menor estaba absorto observando todo el proceso como su realmente entendiera lo que hacían pero le llamaba más la atención el rico olor dulzón de la pera recién cosechada.
Bielorrusia era una mujer muy hermosa de trato amable y voz cálida, bastante contraria a su hermana menor que era algo arisca y seria con todos los demás. Las demás renombradas Repúblicas Soviéticas eran en su mayoría hombres así que estaban más unidas entre ambas, además que ninguno de ellos tenían mucha simpatía por el de hoz y martillo por obvias razones, no querían volver a ser anexados luego de la Gran Guerra pues les costó separarse del viejo Imperio Ruso pero por desgracia otra vez tenían que estar respondiendo ante alguien. Así que no había confianza ente nadie y URSS no se molestaba en cambiar la situación porque no le interesaba hacerse su amigo en un bonito día de campo con flores a su alrededor, sin contar que ahora su única prioridad era criar al de ojos lavanda y educarlo como alguien de bien.
══════ •『 ♡ 』• ══════
-No era necesario que te quedaras a almorzar -Murmuró algo fastidiado, la más baja no había soltado a su hijo en todo el día y se la pasaba libremente moviendo cosas de lugar en la casa como si alguien se lo hubiera permitido-.
-Le aseguras el pañal con cinta adhesiva, solo Dios sabe qué otras salvajadas haces al bebé -Dijo virando los ojos la rubia, en sus brazos estaba el bicolor feliz chupeteando una pera completa parcialmente pelada para que no se manchara mucho la ropa a pesar de tener supuesto un babero-.
-Que no me gusten los objetos punzantes no significa que sea un padre negligente, Rusia está en perfecto estado físico y de salud. -El castaño mayor frunció el ceño realmente ofendido que insinuase algo así, puede que sea su primera vez lidiando directamente con un pequeño pero tampoco era un jodido incapaz-.
-...¿Lo consideras tu hijo?.. -La de ojos celestes murmuró mirándolo pasmada, como si realmente esas palabras no hubiese salido de la boca ajena pues era algo bastante inverosímil para procesar-.
-Tienes dos minutos para salir de mi propiedad antes de que ordene soltar a los perros. -Gruño el dueño de casa levantándose para rodear la mesa y quitarle al niño de sus brazos que apenas se inmutó al estar más concentrado en su fruta-.
-Está bien, está bien.. sólo era una pregunta, me tomó por sorpresa porque siempre decías que no te gustaban los niños.. -Bielorrusia también se levantó de su silla alzando las manos como señal de rendición, notando aliviada como el contario respiraba más calmado y las venas de su cuello dejaban de marcarse- Me quedaré esta noche, para enseñarte algunas recetas simples porque falta poco para que comience a comer más y sé que solo sabes preparar sopa..
El carmesí no respondió nada pero subió al segundo nivel, ya era hora de que el menor se alimentara de algo más que peras y obviamente no iba a haberlo frente a ella así que se metió a su habitación cerrándola con el cerrojo. Se deshizo de su suéter y tomó una de las almohadas para acomodar a Rusia sobre esta así no teniendo que alzarlo o inclinarse, le quitó la fruta de las manos y cuando lo vio fruncir el ceño lo acercó a su pecho virando los ojos ante lo enojón que era en ocasiones.
Este inmediatamente se aferró al pectoral izquierdo del de hoz y martillo que se distrajo ordenándole el cabello en lo que comía, finalmente había dejado de ser tan extraño tener el pecho un par de tallas más grande y que en las mañanas se levantara con pequeñas manchas en la ropa pues algunas gotas se escapaban cuando dormía de lado y se presionaban.
![](https://img.wattpad.com/cover/306724968-288-k109659.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Dad in Training! (URSS & Rusia)
Fanfiction¿Qué si estaba en sus planes?, claro que no, joder. ♡ -¿Qué rayos esperas que me haga yo con un bebé, te haz vuelto loco? . -¿Porqué no te duermes?, me quiero morir, son las 3 a.m. . -¡No no, no toques eso, Rusia malo! . -Si te sientas en esa esquin...