Capítulo 23

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LA VERDAD

UN ESCALOFRÍO RECORRE LA espalda de Amelia «Este día no podría ir peor» piensa ella con ironía

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UN ESCALOFRÍO RECORRE LA espalda de Amelia «Este día no podría ir peor» piensa ella con ironía. La habitación queda en silencio.

—Bien, andando—exclama Newt para luego tomar el brazo de Amelia y Thomas —. De ninguna manera voy a dejar que vayan solos.

Los tres siguen a Chuck por el pasillo, Newt los había soltado en cuanto salieron de la habitación del consejo, bajaron por el pasillo hacia una estrecha escalera de espiral, Newt dio el primer paso, pero antes se gira hacia Chuck y le lanza una mirada fría.

—Tú te quedas—advierte, Chuck se limitar a asentir.

—Hey, Chuck—lo llama Thomas, mientras Newt sube las escaleras Amelia lo sigue—. Me eligieron como corredor, así que ahora tú estás con un colega semental.

Mientras Amelia subía por las escaleras se dio cuenta de que sus manos temblaban y supo que estaba aterrada de ver a Alby en el estado en el que estaba.

—Sí claro—escuchó decir a Chuck antes de subir al último peldaño.

La madera cruje bajo el paso de Thomas mientras este subía por las escaleras. «No quiero ir, no quiero ver a Alby» pensó limpiando las palmas de sus manos en los jeans por tercera vez en el día. Newt los espero en el pasillo, era siniestro y lúgubre a la escasa luz del día.

Se quedaron en el extremo opuesto del pasillo, sin quererlo a Amelia le vino el recuerdo de Ben y por un momento sintió ganas de devolver el desayuno, recordó su piel entera, las venas sobresalientes. Siguieron a Newt en silencio hasta la segunda puerta a la derecha, el rubio toco la puerta y un gemido fue su respuesta, seguido de esto Newt abrió la puerta, el miedo con la desesperación le oprimieron las entrañas a Amelia antes de que Newt pusiese un pie dentro de la habitación, el rubio les hizo una señal para que entraran.

Thomas entro primero que Amelia, la castaña se esperaba lo peor, pero en cuanto Thomas se apartó lo único que vio fue un adolescente con aspecto débil sobre la cama, con los ojos cerrados.

Sin hacer ruido Amelia cierra la puerta detrás de ella. No era lo que se esperaba.

—¿Está dormido?—pregunto Thomas en un susurró, Amelia lo miro de reinos y noto que el castaño estaba pálido y sudoroso.

—No lo sé—respondió Newt en voz baja.

El rubio se acercó a la cama y se sentó en una silla de madera junto a la cama, Thomas ocupó la otra silla que había en la habitación por lo que Amelia quedo de pie junto a la puerta.

—Alby—susurró Newt—. Alby, Chuck dijo que querías hablar con Tommy y Lia—hablo en voz alta, los ojos de Alby se abrieron de pronto, sus ojos estaban inyectados de sangre. Miro a Newt, luego a Thomas y por último miro a Amelia. Con un gruñido se incorpora en la cama y se sienta con la espalda apoyada en la cabecera.

𝐌𝐄𝐌𝐎𝐑𝐈𝐄𝐒┃𝐦𝐚𝐳𝐞 𝐫𝐮𝐧𝐧𝐞𝐫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora