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                         Kenya

Vi la sangre salpicar, corriendose por el suelo y lo vi a él nuevamente muerto. El rostro de Bernat se cubría de sangre, no mostraba ninguna expresión en su rostro.

Charlie estaba arrinconado, temblando como un niño y desesperado. Nunca creía que lo vería de esa forma tan alterada. Lágrimas por sus ojos corrían, sollozaba en silencio sin darme la mirada. Cuando disparo, dejó caer el arma en seguida y no aguanto las emociones que se le vinieron encima, se aterro tanto que corrió al rincón ocultándose en la sombra. Quería hablar con él, controlarlo, pero no sabía exactamente qué decirle.

No había duda, Bernat solo dijo la verdad y cuando su padre hizo la llamada, seguro le dio la terrible noticia, su abuela habría fallecido. Me dio pena, no solo a él, si no también a Penny, me preocupaba demasiado que sentía la necesidad de siempre estar con ella para cuidarla, no podia dejarla sola en ningun momento por esta clase de cosas que pasan. Estoy en shock, tengo miles de emociones sobre mi, tengo miedo. Mire el cuerpo de Bernat, mientras la sangre seguía salpicadose, esta vez presencie su muerte mas cerca, justo en mis narices.

Me senté en el sofa procesando todo lo que pasaba, tente mi cabeza e intente guardar la calma. Escucho algunos  quejidos y dirigí mi vista al sofa, veo a Penny abrir los ojos un poco mientras murmura algo, ella no parece estar muy consciente aún, entonces al darse la vuelta, cae del sofa metiendose un fuerte golpe.

Me levante en seguida y me dirigo hacia ella para ayudar a mantenerla de pie. Echo un vistazo a Charlie quien sigue en el rincón, pero al ver a Penny reaccionar se acerca para ayudarme a que se ponga de pie.

—Tenemos que llevarla a su habitación—le dije a Charlie y él solo asiente.

Entre ambos la ayudamos a ponerse de pie y hacemos que se apoye en nosotros para guiarla hasta su habitación.

Al llegar, la recostamos en su cama y la ponemos cómoda para que siga reposando, estamos pendiente de ella.

—Me da tristeza verla así—Admito frente a Charlie.

—A mi también...—me dijo Charlie.

—Charlie yo...—Suspire—no se que decir, quisiera hacerte una pregunta, pero no estoy segura si ahora es adecuado preguntar.

—Mi papá llamó para decirme que mi abuela fue llevada al hospital por sufrir un infarto—Me confiesa Charlie—ella está en el hospital ahora mismo, con pocas probabilidades de que sobreviva. Según mis papás, la escucharon saltar de un susto, cómo si hubiera tenido una pesadilla y eso es raro, porque se supone qué no debería tenerlas.

—Deberías ir a verla—me senté en la cama y agache mi cabeza—no queríamos meterte en esto...y me siento terrible.

—No, la verdad es que, nunca pensé que me iba a suceder una locura como esta—me dijo Charlie—y aun no sabemos nada de él, incluso...me arrepiento de haberle disparado—Charlie pasa sus manos sobre su cabello—¡soy el mas idiota! ¡Nunca hago nada bien! —lágrimas deslizan por sus mejillas—si Bernat sigue vivo, ¿qué crees que pase?, ese tipo nos tendría en la mira, no nos dejaría en paz, nos va atormentar...¡Voy a ser el siguiente!, arruinaría mi vida...voy a pagar por lo qué hice Kenya...

—Hay una manera de evitarlo.

—¿y cómo? No quiero que se meta con mi familia, en mi vida, ahora entiendo porque Penny quería mantenerse lejos de él, ¡quizá hasta me cueste la vida!

—Le dije a Penny que no tenia que dejarse llevar por él.

—¿y que paso?, mirala, accedió con drogarse y estoy seguro que él tuvo que ver.

CorrompidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora