Durante años Jimin y Taehyung han sido los mejores amigos del vecindario.
¿Qué sucedia cuando ambos estaban realmente interesados en la misma chica?
Una renovada y completamente destrozada chica que abandonó sus vidas cuando recién eran unos niños...
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Miré a Yoongi molesta, es cierto, esos perdedores no eran mis amigos, pero quería sacármelo de encima, lo que menos necesitaba era una ridícula cena con mi mamá y fingir que 14 años no habían pasado, abrazarla y pretender que ahora éramos una familia feliz.
Durante todo este tiempo había estado en un internado exclusivo de mujeres, el infierno, incluso cuando era un internado religioso. Yoongi no estaba tan molesto como yo porque él había permanecido en casa con nuestro tío, pero él se rindió conmigo desde el inicio, dijo que no sabía nada sobre cómo educar a una niña y decidió dejarle la tarea a madrecitas dementes que nos llenaron la cabeza de cosas que ahora comprendía no eran necesarias para niñas de tan corta edad.
Para la adolescencia yo ya había perdido los estribos en ese lugar y me dediqué a volverme tan problemática como fuera posible, causándole dolores de cabeza a mi tío, sin embargo, el infeliz en lugar de sacarme terminaba soltando cantidades impresionantes de dinero llamándoles donaciones para que continuaran manteniéndome ahí adentro hasta que cumpliera los 18 años.
Cuando cumplí 15 años perdí toda la esperanza de que mi madre algún día llegara a sacarme de ese lugar y hubiera regresado de la depresión y del alcoholismo porque amaba a sus hijos, sin embargo, no lo hizo, ni siquiera me visitó una sola ocasión. Ahora quería que fingiéramos que éramos una familia feliz, pero estábamos lejos de serlo, ella me había abandonado, me habían separado de mi hermano y del mundo en general, encerrándome en un lugar donde las niñas podían ser tremendamente crueles, haciendo mofa sobre lo poco que le importaba a mi madre y claro que algunas creían que la muerte de un papá era divertida.
Así que, efectivamente, estaba enojada con la vida. Finalmente, a los 18 años estoy de regreso en casa para estudiar la universidad, logré ingresar sin problemas, porque, aunque siempre encontraba una oportunidad de generar problemas, la verdad es que era demasiado inteligente y mis calificaciones habían sido impecables a diferencia de mi conducta.
Yoongi no lo expresaba abiertamente, pero se sentía culpable de todo lo que yo había vivido, él sabía que había corrido con la parte sencilla de todos los problemas de nuestra familia, pero cuando él cumplió los 18 años dejó de visitarme en ese sitio, durante dos años no había recibido una sola llamada, me habían abandonado, ahora no podían arreglarlo.
- Cierra el hocico, Min Yoongi – le respondió uno de ellos – Tú y Namjoon me tienen harto, si nosotros somos perdedores, tú eres un imbécil.
Mi hermano lo miró con cara de pocos amigos y comenzó a caminar hacía ellos empuñando las manos, conocía ese comportamiento, yo era exactamente igual, corrí y me puse delante de Yoongi, quien al verme suavizó un poco la mirada.
- Quítate Minnie.
- No, regresa a tu casa y deja a mis amigos tranquilos.