2da parte - 3

494 28 2
                                    

Narra T/n

Desde que Mikoto nació, me es aún más imposible olvidar a Kakashi, se parece demasiado a el. Igualmente no dejo de amarla, fue el resultado de una historia de amor y no dejo de creer en que fue algo sincero. Es una pena que se haya acabado.
Me he mudado a un pueblo cerca de Konoha junto a Itachi. Estaba raro volver a la civilización luego de tanto tiempo.
-Te gusta aquí? No es tan excitante como Konoha pero es un lugar tranquilo para que Mikoto crezca-. Dijo Itachi.

-Es demasiado tranquilo... Pero si, mientras tanto creo que este lugar estará bien.

Desde que Mikoto estaba en mi vientre supe que querría ser shinobi, y si eso es lo que quiere, tendremos que volver a Konoha para ello ya que no podría negarselo.

Me siento feliz de tener a la niña conmigo, pero extraño demasiado a Kakashi, sé que puedo vivir sola, no necesito que el me proteja ni que este ahí, pero lo amo y que este conmigo es lo único que podría darme felicidad verdadera, por momentos solo quiero correr a buscarlo y luego me arrepiento porque lo nuestro es algo imposible.

*1 año después*

Mi vida es demasiado tranquila, mi pequeña Mikoto ya da sus primeros pasos y me dedico a verla crecer. Itachi pasa mas tiempo conmigo aunque me dijo que en algún momento tendría que irse y no volvería, aunque falta para eso.
Nos encontrábamos en la mesa tomando té mientras la pequeña dormía.

-T/n debo decirte algo...-. Dijo Itachi.

Asentí mientras bebía.

-El otro dia me encontré con Kakashi, y lo mandé al hospital con un genjutsu.

Casi escupo mi té al oir eso.

-QUE HAS HECHO QUÉ? Por qué has hecho eso?

-Primero que nada, se lo merece, su actitud de dejarte ir como si nada me molesta mucho, te ha echo sufrir demasiado y aunque amaría que esten juntos, solo me desquite, pero esta bien probablemente en estos dias ya estará despertando-. Dijo el.

-Yo... he estado pensando en algo... digo nada nada-. Dije.

- T/n ya has hablado, dilo-. Dijo serio.

Mierda, porque abrí la boca.

-Te quedarías con Mikoto hasta mañana? Quiero hacer algo-. Dije

Itachi asintió sin preguntar, aunque probablemente ya sabía lo que iba a hacer.

Tan pronto cayó la noche me dirigí hacia Konoha, he estado pensando hace mucho en cuando podría ir a verlo y ahora que se que esta en el hospital me decidí.

Recorrí cada ventana por fuera hasta que logré verlo. Dormido, con un libro en su cara. Se había dormido leyendo como siempre lo hacía.
Aún no era madrugada, era temprano para estar durmiendo, pero seguro que la batalla contra Itachi le quito mucha energía.
Que debo hacer? Despertarlo?
Me metí en su habitación, sin pensarlo y observé el lugar. En un costado una silla con su ropa y un chaleco chunin. Probablemente le quede muy bien, dejé la ropa sobre una mesa y me senté en la silla mientras lo observaba y a la vez pensaba si debería despertarlo o no.
Al cabo de unos minutos comenzó a moverse. Ese fue el momento en que tendría que haberme ido.
Retiró con su mano el libro de la cara, seguía dormido, tiro el libro al suelo y se puso del costado donde yo estaba. Y lentamente abrió los ojos
-Cuando dejaré de imaginar que sigues conmigo?-. Susurró el.
Luego de eso volvió a cerrar sus ojos.
Podría decirle que soy yo de verdad, que no esta imaginando nada. Pero que cambiaría si hiciera eso? De verdad querrá saber acerca de mi, de la verdadera?
Kakashi nuevamente se levantó de la cama y camino de frente hasta donde me encontraba sentada.

Advertencia: Contenido (+ 18)

-Aunque esta vez... se siente diferente-. Dijo mientras apoyaba sus manos en el posa brazos de la silla y miraba mis ojos dulcemente.
Diablos como lo extrañaba, como fue que pude olvidarme de esta sensación única que me recorría el cuerpo y alma.
-Kakashi, vuelve conmigo, por favor-. Dije a punto de llorar.
Tocó mi mejilla con su mano suavemente y apartó un mechón de pelo de mi cara. Para luego proceder a besarme con pasión, lo único que pude hacer fue dejarme llevar, continuó besando mi cuello y luego volvió a besar mis labios. Me levanto de la silla y sin dejar de besarme me recostó en la cama de aquel hospital. El me quitaba la ropa interior casi rompiendola, cosa que me excitó demasiado y no pude evitar gemir.
Entró en mi lentamente soltando gemidos suaves, eso me volvía loca.
-Joder, que rica eres-. Dijo entre gemidos.
Comenzó a moverse lentamente dentro de mi y luego mas rápido y mas duro. Probablemente todo el hospital nos este escuchando pero que importa ahora, solo quería más de el en este momento.
-No pares por favor-. Dije.
Aumentó su velocidad haciendo que me orgasmo se aproxime hasta ya no pude aguantar y solté un gemido.
-Me fascina que te guste amor-. Dijo el llegando a su orgasmo también.
Salió de mi y besó mi frente luego se recostó a mi lado abrazandome.

-Kakashi te extraño mucho... crees que podríamos estar juntos de vuelta?-. Pregunté.

Aunque el ya estaba dormido profundamente.

Escuché pasos aproximándose por el pasillo y me retiré de la habitación por la ventana. Aunque no tenia ningún problema con que alguien me viera. Prefería evitarlo.
Alguien entró en su habitación y se quedo allí un rato. No llegué a escuchar nada de lo que esta persona decía, pero, creo que era la enfermera probablemente para traer alguna medicina o algo asi.
Ya iba de camino a casa, pero decidi pasar antes por la tumba de mis padres.

Me adentré en el cementerio, aun era de noche, pero no me importaba, busque sus lápidas y sin poder evitarlo comencé a llorar, extrañando mi vida como era antes, tener a Mikoto me ha devuelto algo de felicidad, pero no es lo mismo, los extraño demasiado.
    A partir de hoy, comienza un nuevo objetivo, otra meta que alcanzar, se que tomará tiempo, quizás hasta años. 
Pero ya no puedo no hacer nada con esta tristeza y vacío que siento. Está decidido, encontraré a la persona que esta detrás de todo esto y tomaré venganza y luego de eso sino estoy satisfecha conmigo misma buscaré a Kakashi y le diré que lo necesito.
Aún no sé que ha significado lo de esta noche, pero es mejor dejar las cosas como están. Y perseguir mi objetivo. Entrenaré el triple que antes, me haré muy fuerte, aumentaré mis reflejos y ya nadie podrá lastimarme ni a mi ni a mi hija porque yo la protegeré como debí haber protegido a mi familia aquella vez.
Descansen. Papá y Mamá...
  

Te amo (Kakashi x TN) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora