-Atentamente, Eustaquio

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Sarita Elizondo bajo hacia la cocina ya lista para comenzar su día, al llegar al final de las escaleras vio a su empleada, Irene, colocando la mesa para el desayuno.

-Buen día, señora Sarita –saludó ella-

-Buen día, Irene, ¿Y Gaby?

-Salió hace un rato, me dijo que había olvidado que tenía examen

Sara negó con la cabeza sonriendo al escuchar aquello, sin duda su hija era un caso imposible.

Sara se sentó en la mesa esperando que Irene le colocara el café frente a ella, cuando vio a su empleada dirigirse hacia la puerta trasera, cuando regresó, la vio con un arreglo gigante de rosas rojas.

-¿Y eso, Irene? –preguntó Sara extrañada-

-Gonzalo solo me ha dicho que se las han traído a usted, señora –le informó colocándolas sobre la mesa-

Sara rápidamente se dirigió hacia el arreglo para ver si traía alguna tarjeta, por fortuna, así era.

"Para la señorita Natalie...

Buenos días, ¿Cómo se encuentra? Espero que de maravilla, le envió estas flores para hacerle saber que no dejo de pensar en usted, señorita.

¿Ha vuelto a olvidar como besa su marido? Estoy dispuesto a ayudarle a recordar cuando usted lo precise.

Atentamente, Eustaquio"

Sara sonrió y se mordió el labio al darse cuenta de quien provenían esas flores.

Franco Reyes.

-Señora Sarita, aquí tiene su café, iré a acomodar los cuartos –le informó su empleada-

Sara asintió e Irene se retiró, Sara solo podía observar las hermosas rosas que le había enviado aquel hombre que la volvía loca.

-¿Te gustaron? –Preguntó una voz detrás de ella-

Sara se sobresaltó, y al darse la vuelta vio a Franco parado en la puerta trasera

-¿Qué haces aquí? –Preguntó ella levantando una ceja-

-Vine a verte, ¿acaso no puedo?

Sara camino con las flores hasta la cocina, donde tomo un florero para colocarlas, Franco la siguió

-Sabes que es peligroso que te vean aquí –le recordó ella-

-Pero tenía ganas de verte

Sarita dejó las flores a un lado y se volteó para mirar a su marido

-Mi amor, tienes que tener cuidado

Llevaban tres semanas viéndose en secreto, reconstruyendo su relación mientras Franco se escondía en casa de Juan, hasta que lograsen dar con los malnacidos que lo habían secuestrado.

Franco se acercó a Sara y colocó sus manos en las caderas de su esposa, alzándola un poco para sentarla sobre la encimera, para luego colocarse entre las piernas de ella

-No me importa que me vean, quería darte un beso –dijo el-

Franco acercó su boca a la de su esposa, conectando sus labios con los de ella, en un beso lento y suave.

-Amor, tienes que cuidarte, por favor –le pidió alejándose un poco, quedando sus rostros a milímetros de distancia-

-Yo sé cuidarme, Sara, pero déjame venir a verte de vez en cuando, no tolero estar lejos de ti.

-Me viste ayer –río Sarita empujando a Franco-

La noche anterior, Sara y Franco habían estado toda la tarde paseando por los predios más alejados de la hacienda de Juan, donde casi nadie va, para asegurarse de que nadie los vería.

-Ya pasaron más de doce horas, ¿No te parece demasiado?

-No, ¡Acordamos vernos esta tarde, Franco! –río ella-

-¿Acaso no quieres verme?-preguntó el- pues me voy

-No seas bobo- dijo ella agarrándolo del borde de su camisa para acercarlo a ella-¿Aun estas dispuesto a ayudarme a recordar como besa mi marido? –preguntó-

-Siempre estoy dispuesto

Sara unió sus labios con los de su esposo nuevamente, colocando sus manos en las mejillas de Franco, intensificando el beso, mientras que el dirigió sus manos hacia su camisa.

Franco deslizó sus manos dentro de ella, acariciando su estómago, subiendo lentamente hacia sus pechos

-¿Qué haces? –Preguntó ella entre besos-

-Yo necesito que me ayudes a recordar como es el cuerpo desnudo de mi esposa, ¿estas dispuesta?

-Irene está arriba, Franco

-Mmm, pues conozco otro lugar a donde podemos ir

-¿Ahora que locura piensas hacer? –río ella alejándolo-

-¿Me acompañas a las caballerizas? –preguntó el extendiéndole la mano-

Sara se mordió el labio antes de tomar la mano de Franco para bajar de la encimera.

Sarita y Franco {Imagines|One shots PDG2}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora