Where you at

Capítulo 20

Se miró en el espejo intentando no ser descubierta haciendolo y sonrió, se sentía bonita.

Haseul le había regalado un hermoso vestido blanco que la cubría por debajo de las rodillas, los hombros del mismo eran hermosos con pequeños detalles bordados y en el cuello portaba un collar creado con perlas que Sooyoung le obsequió anteriormente.

La arena sería lo único que cubriría los pies de los invitados según la tradición, así que no llevaba calzado. Su cabello estaba recogido en por la mitad, entrelazado por un moño blanco. El detalle era levemente más grande que lo habitual, pero la hacía lucir adoraba.

El maquillaje la favorecía de forma maravillosa, pues la medicina no era el único talento que Haseul poseía. Pestañas alargadas, rubor en sus mejillas y labios cerezas. Sus pómulos tenían además un camino de lentejuelas que terminaba en sus ojos, haciendo que su mirar brillara aún más.

- ¿Estás lista? - sus defensas bajaron cuando observó a la pelirroja.

La ropa de Vivi era totalmente distinta a la suya; falda rosa ajustada y blusa de tirantes blanca que dejaba ver su abdomen trabajado, junto a un elegante sombrero que la hacia lucir misteriosa.

- Haseul dijo que nos adelantemos, ella está viendo al abuelo Kang, al parecer el vómito regresó.

Conforme avanzaban, las luces y la música se incrementaba. Caminaron por aproximadamente treinta minutos hasta localizar la celebración. Chuu estaba más lejos de lo que alguna vez estuvo de su hogar, la casa de Sooyoung o el restaurante, pero se sentía a salvo.

La arena en sus pies dejó de ser una molestia pues aunque en un inicio ardía por estar previamente expuesta a los rayos del sol, comenzaba a enfriarse ocasionandole una sensación extraña.

- Oh ¡mira! Los Lee - señaló la mayor hacia el mar - Iré a saludarlos - Chuu se quedó en su lugar, incapaz de interactuar con el resto de los habitantes.

Habían pasado unos meses desde que despertó y su vida en la isla era hasta el momento buena. No había una cantidad enorme de habitantes así que podía decirse que los conocía a todos, algunos solo de vista o por haber escuchado sobre ellos en alguna ocasión. Aún así, se sentía introvertida ante la posibilidad de iniciar una conversación.

Varias jóvenes se acercaron a ella y las saludaron. Conversaciones cortas sobre el trabajo y su recuperación que no tendrían futuro, después regresaban junto a sus parejas o familias.

Sintió unos dedos fríos sobre sus ojos, eclipsando su mirada. Sus pestañas se unieron sin intentar luchar por abrirse nuevamente porque conocía el perfume que la estaba abrazando.

- Te ves preciosa - escuchó susurrar en su oído, apartando levemente las manos de su rostro.

Chuu se giró y la encontró sonriendo, con esa característica sonrisa soñadora que adornaba su cara. No pudo evitarlo y apretó las mejillas cariñosamente de la más alta, ante la intensidad de emociones bajo su piel.

- Sooyoung - pronunció, quedándose sin palabras.

A diferencia de ella, la mayor vestía un pantalón de mezclilla algo corto que le permitía no ensuciarse, abrazando sus caderas, pronunciandolas y remarcando su silueta. Una blusa lila que bailaba con el viento y su cabello estaba ligeramente ondulado, creando una nueva imagen en ella. El detalle en su cabeza era una corona de flores de la misma tonalidad que su blusa.

Haseul mintió. Chuu no era la princesa, Sooyoung lo era.

- ¿Estás divirtiendote? - Chuu asintió sin dejar me mirarla. En serio se veía hermosa - Te ví llegar, a las dos. Por favor disculpa si me apresuré en saludar, no quiero abrumarte o estropear tu velada, pero no pude evitar venir hacia tí.