Where you at

Capítulo 29

- ¿No contesta? - negó como respuesta - Gracias por aceptar verme.

Suspiró, exhalando todo el aire acumulado en sus pulmones - Chaewon va a volverme loca.

- ¿No lo hace ya? - sonrió.

- Sí, cada vez está más insoportable - rodó los ojos.

- Me...me refería a que te volvía loca de amor.

- Oh.

Seguido de esto, Hyeju guardó silencio ante la penosa mirada de su mejor amiga Jungeun.

Sí, había conseguido ver a Chaewon después de que desapareció durante toda la noche, pero solo fue un momento y su explicación de donde se encontraba con anterioridad no le fue suficiente.

- Como sea - retomó - Me dijo que había pasado la noche con Jinsol. Al menos cuando ella vivía aquí, conocía el paradero de Chae.

- ¿Ahora quieres que vigile a tu novia? Pensé que los celos no eran lo tuyo.

- ¿Puedes dejarme terminar? - Jungeun sonrió - No es posible que haya estado con Sol.

- ¿Por qué no? Son mejores amigas, pasan todo el tiempo juntas y -

- Porque Jinsol vive con Eunbi.

Fue el turno de Jungeun de callar recibiendo aquel nombre y aquella realidad como puñal al alma.

A diferencia de la azabache frente a ella, no había logrado hablar con la chica que le volaba la cabeza. Así que lo único que tenía de ella, eran recuerdos de aquella noche.

- Sí, tienes razón - susurró.

- Es su novia y vive en su casa ¿Por qué Chae dormiría junto a Eunbi? - negó - Es todo una mierda.

- Vamos Hye, no es tan complicado.

- ¿A qué te refieres?

- Chaewon te necesita. Ella está exageradamente gritando por tu atención. Abre un poco más los ojos.

- Ella está bien. Pero no puedo descifrar su mente.

- Una ironía ¿No lo crees?

- ¿A qué te refieres?

- Tantos estudios que tienes acerque del cerebro, pero no puedes entrar en la cabeza de tu novia.

Hyeju entendió sus palabras y fueron un balde de agua helada.

Era verdad que su trabajo era exigente y agotador y la mantenía alejada de la mayor, pero no por eso dejaba de quererla.

Pero el tiempo pasaba y algo dentro de ellas comenzaba a oler mal. Tal vez y solo tal vez, Hyeju sabía que era porque su relación se estaba echando a perder.

- Vaya.

- Por favor, no digas solo "vaya".

- Bueno, Jiwoo siempre fue una perra.

- ¡Hey! No te permito que -

- Aún no termino - alzó la mano, interrumpiendo - Jiwoo tenía un carácter del infierno, y sí, era divertida pero parecía sospechosa siempre. En cambio Jinsol, la dulce y atenta Jinsol, ella siempre ha sido esa parte que te complementa.

- Yo amo a Jiwoo.

- Sí, pero no está aquí, y tuviste sexo con tu mejor amiga. No es tan malo.