¿Te quedas conmigo?

El apocalipsis

"Cuando sientes que algo se te revela, muy dentro de ti, sabías que eso va a suceder. Pero sientes miedo porque ese evento todavía no se ha acontecido, y el sentimiento que te evoca provoca que planees e idealices. Y entonces, algo surge y genera que todo lo que habías pensado, se derrumbe. Ahí es cuando surge el Apocalipsis humano, cuando aquello que soñábamos, y por alguna razón o no se cumple, o se retrasa. Cuando en ti, algo se rompe, que se llama desilusión. He de deciros, que no es un error soñar, ni mucho menos planear los sueños. Pero hay que saber, que cuando hay algo que no sucede como pensábamos, debes tomarte un tiempo de respiro, para que lo que se ha destruido, pueda salir de nosotros, a su debido tiempo. No te fuerces, simplemente siente aquello, y supéralo cuando tu mente te lo diga. Las adversidades forman parte de nuestro día a día, y solo en ti, encontrarás las estrategias para sobrellevarlo"

Quedan menos de tres meses para que se celebre la boda, estoy entusiasmada. Han sucedido muchísimas cosas y experiencias diferentes durante este año, ha sido una etapa diferente e inolvidable. De hecho, ya no estamos en el Estado de Alarma, la desescalada ha terminado, pero no sabemos cómo se van a desarrollar nuestras vidas, sin a penas restricciones. Creo que puede llegar a ser un retroceso, no sé si estamos preparados para asimilar esta cierta "libertad" que se nos ofrece sin meter la pata otra vez.

No sé si os lo he comentado, pero me casaré con mascarilla. Está hecha y diseñada por mi madre, es exactamente igual de preciosa que mi vestido, cumple todas las reglas sanitarias. Bueno, ya es hora de que le deje espacio a mi madre, porque va a diseñarle el traje a Nico, más o menos ya tiene hecha una idea, pero debe comenzar a tomarle medidas porque si no se nos echará el tiempo encima.

Todavía me cuesta asimilar que voy a casarme, y más todavía que va a ser en estas circunstancias y con todo tipo de cuidados. No tenemos ni idea cuanto tiempo se va a alargar esta situación, tampoco si tan si quiera va a poder resolverse o vamos a tener que aprender a convivir con el virus.

Hace un par de días que noto a Nico como en una nube. La verdad es que tengo miedo a preguntarle, porque me temo lo peor. No sabemos nada del trabajo, o igual él sabe algo. Pero no solo me preocupa eso. Hace unas siete semanas que tuve un retraso con la menstruación, pero puede ser que haya sido los nervios por todo lo que está pasando. Algo dentro de mí me dice que no se trata de eso. Siento mucha felicidad pero a al vez terror por lo que pueda suceder, pero ya no me siento sola. Debo hacerme una prueba, para corroborar que se trata de la cosa más maravillosa que me pueda pasar, y en ese caso comunicárselo a Nico.

- Amor, ¿te encuentras bien?
- Sí, solo estoy cansado del trabajo, nada más.
- ¿No tienes nada que decirme?
- ¿A qué te refieres Mía?
- No... a ver, a nada en concreto. Es que me da la sensación de que estás gritando en silencio, y si puedo ayudarte me gustaría tenderte mi mano.
- Joder... - Se echó a llorar, no sé si sentía tristeza, frustración o miedo, pero me estremece el cuerpo por dentro verle así.

Me acerqué y le abracé tan fuerte como él hacía conmigo para aliviar todos sus males. Le acariciaba la cabeza tratando de calmar su dolor.

- Nosotros vamos a estar bien.
- No puedo...
- ¿Qué te preocupa?
- No poder estar aquí, a tu lado. - Me quedé pensativa, porque no entendía a que se estaba refiriendo, él siempre estaba a mi lado apoyando y queriéndome.

- No pienses en eso, estamos juntos aquí y ahora, y pase lo que pase siempre lo estaremos.
- Mía, hablo en serio...
- Cuéntamelo.
- Me han llamado del restaurante, y quieren que en una semana esté allí.

Volvió a llorar, sentía ira de no poder quedarse aquí. Pero estaréis pensando, pues vete allí y ya está, si total ya has ido, por qué no vas a poder ir ahora. Debo confesaros que debía haber renovado la documentación, el pasaporte, durante el confinamiento. He estado llamando y está en trámite, pero no saben cuanto tiempo va a tardar en llegar. Sin eso, no puedo pedir el Permiso de Residencia, la idea era quedarnos allí de manera permanente, si todo iba bien en el negocio, gracias a que su tío lleva más de cinco años residiendo en Londres.