El camino

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"El camino no está hecho, el camino lo construyes tú mismo. No lo utilices como excusa, ponte objetivos, lucha por lo que quieres y sobretodo, no olvides cuál es tu esencia y espárcela por el camino"











Después de llevar un par de meses saliendo, todo iba muy bien. La verdad es que nos pasábamos el día juntos, íbamos a la piscina, a la playa, a pasear... Todo fluía a la perfección.

Comenzaron a surgir en mí, un montón de sentimientos, prácticamente indescriptibles. Y entonces entendí, que la única manera de poder expresarle aquello que sentía, era de la mejor manera que sabía hacer, escribiendo poesía.


Conviertes en oro
todo aquello que tocas,
Haces de algo minúsculo
Algo enorme.

Por donde pasas
Vas dejando huella,
La huella que otra persona
Convierte en su camino.

Pero, ¿qué camino escoger?
¿El de verte, amarte y respirarte?
O ¿el de anhelarte, extrañarte y contemplarte?
Que difícil elección,
Que comienza como una ambición
Y termina convirtiéndose en una
equivocación.

Es una lucha,
que trato de combatir.
Es una musa,
Que trata de salir.
Es la luna, que se esconde
Sin querer partir.
La Paz,
tira su hacha de guerra.
El vasallo,
le entrega su vida.
El sol,
le entrega La Luz.

Todo parece ser,
que tiene vacíos.
Todo parece ser,
que le falta valentía.
Todo parece ser,
que le falta brisa.
Todo parece ser,
que le falta alegría.
Todo parece ser,
que le falta compañía.
Todo parece ser,
que nada es.

Y lo que no es,
no tiene importancia.
Pero lo que parece ser
de una manera,
terminado siendo,
de una o de otra,
como el amor.

Es, se siente.
Se esfuma, duele.
Se quiere, se odia.
Se enternece, se encarece.

Pero en el fondo,
tú eres el iris,
oscuro pero claro.
Eres el mar,
revoltoso y cariñoso.
Eres el viento,
que acaricia pero te enfría.
Eres como la lluvia,
que te moja y te divierte.

En conclusión,
eres la persona que sueño,
que anhelo, pero que quiero.
Eres la persona que se ve,
que se defiende y se ofende.
Eres la persona, que encandila
mis días, mis noches y mis amaneceres.

Tú, simplemente tú.
Tan dulce, tan inocente.
Tan inherente pero pendiente.
Tan sencillo pero revuelto.
Tan libre sin consuelo.
Tan grande pero indefenso.

Tú, eres la estrella, que veo.
Tú, eres la flor, que huelo.
Tú, eres el que adoro.
Tú eres, el niño de mis ojos.

Se estaba terminando el verano. Comencé a sentir miedo, ¿y si solo se trataba de un amor de verano? No quería que cuando comenzara el curso, terceras personas se metieran de por medio. La verdad, es que cuanto más la gente sabe de ti, más fácil es que estropeen lo que tienes. Era duro únicamente hacerse a la idea de que todo lo que habíamos vivido, podía esfumarse en tan solo segundos.

Decidí mantener una conversación con él sobre esto. Tenía demasiadas personas que querían hacerme daño en el colegio. En cuanto supieran que estábamos juntos, sé que querrían hundirme. No podía dejar que esto se estropeara.
- Amor, quiero hablar contigo.
- Qué pasa?
- Pues... No sé si quiero que la gente se entere de que estamos juntos, sabes.
- ¿A qué te refieres? Ya lo sabe mucha gente.
- Pues a eso me refiero, no quiero que todo se arruine.
- No va a pasar eso amor.
- No lo sabes... La gente se mete en el medio.
- Pues no haremos caso a lo que nos digan.
- Solo nos creeremos lo que nos digamos nosotros. Si alguien te dice lo que sea que yo he hecho, dicho o dejado de hacer, no te lo creas. Yo no voy a mentirte, y pase lo que pase siempre te voy a ser sincera porque te quiero.

Sí, acababa de decirle por primera vez que le quería. Supongo que no le importó absolutamente nada de lo que le dije. No es fácil combatir día tras día contra tus propios demonios más el infierno en que me hacían vivir. Debía contarle a Nico la situación que estaba viviendo y con lo que se encontraría nada más empezara el curso. Se lo debía. Así que eso hice, aparte de decirle que le quería.

Él había llegado y yo me estaba curando.

Le debía la verdad de quién era realmente. Pero no era tan fuerte emocionalmente para decírselo. Mientras os estoy contando esta historia, escucho Pray de Jaden Hossler. Me gustaría que le dedicarais unos minutos, para que entendáis lo difícil qué es a veces pedir ayuda.

Heaven only knows when I'm in hell
None of my friends can even tell
I wanna f*cking die but I never say it
Sick of getting high but I do the same shit
I can't even cry so I try to fake it
I hate it

I pray to god let me die in my sleep
I pray to god let me die in my sleep

You're as sick as all the secrets you keep
But the truth is I don't wanna be me
I pray to god let me die in my sleep
Now I'm waking up and I'm not dead

Living off the words i know you said
I feel like I'm alive and I'm gonna make it
Maybe if I cry I don't have to fake it
I'm giving up my pain so you can take it
I hate it.

Sí. Es lo que estáis pensando. Yo también pasé por eso. Os lo contaré en su debido momento.

Bueno, no encontré el valor suficiente, hasta hoy, con 25 años para contar la auténtica realidad de mi sufrimiento, y el valor del apoyo que recibí.

A Nico, solo pude contarle que mis días no eran fáciles. Vivía en una constante lucha para no desaparecer. Recuerdo a la perfección sus palabras. Sujetó mi rostro con todo su amor y me dijo: mientras yo esté aquí, jamás volverás a caerte. Nunca estarás sola Mía. Esas palabras fueron un aliento para mi vida. Pero no sabía a lo que iba a tener que atenderse cuando todo volviera a su hilo.

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