ꜱᴇʀᴇɴᴅɪᴘɪᴛʏ ~ ꜱʜɪɴɪᴄʜɪʀᴏ ꜱᴀɴᴏ

25

Una silueta que ya se había acostumbrado a mirar estaba en la entrada.

Sin dudarlo abrió la puerta rápidamente.

- Mi vida, ¿Qué te trae por aquí? – Se hizo a un lado para que el menor lograra pasar.

Era Kazutora.

Entró cabizbajo - _____... No quería ser una molestia pero... - Seguía sin mirarla – No puedo ir a otro lado.

- Ven, déjame quitarte esto. –

Lo llevó cerca de la estufa y quitó el abrigo que traía puesto.

Notó que la ropa estaba húmeda, al igual que su cabello, "¿Hace cuánto ha estado caminando?"

- Siéntate aquí, traeré ropa para que puedas cambiarte y algo caliente para que puedas beber y comer, ¿Está bien? –

El chico asintió.

No tardó nada en llegar con la ropa.

Luego, para cuando el chico ya se había cambiado en el baño, ella volvió con una taza de chocolate caliente y bocadillos dulces.

- Ten, come. – Lo dejó frente a él.

- Muchas gracias. – Tomó la taza y bebió de su contenido – Está muy rico. –

Pasó un rato, _____ con la ayuda de una toalla secó el cabello del chico.

Luego trataba de buscar la mirada del menor, pero éste solo miraba la comida.

- Siento venir... - Al fin la miró.

Tenía unos golpes en su rostro y en su labio una pequeña cortadura.

- ¿Qué sucedió? – Miraba su rostro con detenimiento – Iré por el botiquín. –

- No, déjelo así... Me lo merecía después de todo. –

- ¿A qué te refieres? –

- Mis padres siempre discuten... hoy no fue la excepción. – Jugaba con sus dedos – Él iba a golpearla, pero me interpuse y lo empujé... Luego él me golpeó a mí. – Arrugaba la ropa con sus manos – Me fui en cuanto se detuvo. –

Ella se levantó en lo que el chico terminó de hablar. Fue a buscar el botiquín y se ubicó a su lado.

- No mereces nada de lo que te sucedió. – Limpiaba las heridas del chico y luego le puso una bandita a cada una – Eres todo lo que está bien, no te culpes por los errores de los demás, ¿Sí? –

Unas lágrimas se asomaron por los ojos del chico, se las limpió y luego asintió.

_____ fue a dejar el botiquín a su lugar y volvió al lado del menor.

- ¿Quieres ver algo?, o prefieres dormir. – Tomó el control.

- Ver algo, no quiero dormir aún. –

- Excelente, yo tampoco quiero dormir. – Rieron.

- Por cierto, ¿Qué hacía despierta?... Creí que no me abriría porque dormías. –

- Ah, tenía frío, por eso me levanté a encender la estufa. – Mentía, pero eso el chico no lo sabía.

Estuvieron un rato mirando la televisión, luego _____ notó como Kazutora tambaleaba mientras se iba quedando dormido.

Lo tomó en sus brazos y se dirigieron a la habitación que había sido de Izana, ya que estaba bien arropada.

Lo recostó en la cama y lo cubrió con la ropa de cama.