¿Sería posible que aquel chico lograra enamorarla con su torpeza?
Una inseguridad se había desarrollado en él por tantos rechazos, por lo mismo, nunca pensó que ella ya había quedado encantada desde la primera vez que lo conoció.
▻ Historia creada...
- ¿Crees que pueda lastimar si lo hacemos? – Preguntaba entre besos, los cuales bajaban por el cuello de la chica hasta sus pechos, y sus manos recorrían cada parte del cuerpo de ella.
- Estoy casi segura de que no lo haría. – Respondía entre risas mientras pasaba sus manos por el cabello del chico.
Masajeaba el trasero de la pelinegra y le daba uno que otro apretón – Espera... - Se acercó a la mesita que estaba junto a la cama y sacó una revista – Quiero estar seguro, no quiero poner en riesgo al bebé. – Le sonrió y se sentó en la cama, mientras aún tenía a la chica con las piernas abiertas a disposición de él.
- ¿Y eso? – Apoyó sus codos en la cama para mirar con más detenimiento la revista.
- La compré cuando veníamos del hospital, explica muchas cosas útiles del embarazo. – Se puso a buscar el título que necesitaba, no sabía cuanto tiempo le tardaría, considerando que la revista era un poco extensa.
Solo se escuchó una pequeña risa por parte de la chica.
Cuando ya encontró lo que necesitaba, leyó con calma para comprender bien la información – Tenías razón, sí se puede, aunque debe ser con cuidado y con protección... - Miró a su alrededor - Creo que ya no me quedan. – Se alertó al no recibir respuesta por parte de la chica – Amor... -
Quitó la revista de su campo visual y pudo apreciar como la chica dormía plácidamente en la cama. Miró el reloj en la muralla, ya habían pasado 30 minutos desde que se había puesto a leer la revista.
Soltó una risa ligera, tomó el cuerpo de la chica para recostarla en la cama y taparla, seguido él también se acostó a su lado – Hoy fue un gran día, debes estar cansada por todo lo que has hecho... eres una gran mujer. – Soltó un suspiro mientras le acariciaba el rostro a la chica.
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20 de agosto, 2005
- Baji dice que si comes algo dulce, el bebé podría moverse. – Mikey mantenía su mano en el abdomen de la chica.
- Baji es muy sabio. – La pelinegra le sonreía.
El mencionado sonreía con orgullo – Mi madre me contó eso, aunque ya le dije a este enano que se mueve cuando está más grande, estará todo el día esperando a que se mueva. –
Y así era, en la casa de ______ se le estaba celebrando el cumpleaños a Mikey, pero éste no se quitaba del lado de la chica para sentir si es que el bebé pateaba. Y sí, se le refería como "él", ya que estaba seguro de que sería hombre y que además, sería el tío favorito.
- Eso se siente, en su mayoría, a los cinco meses. – Mitsuya intervino – Lo recuerdo por mis hermanas. –
- Tienes razón, fue lo que la doctora me dijo. - ______ le sonreía al chico.
