Mi Más Hermosa Debilidad (MATHEO RIDDLE)

CAPÍTULO 32: ENTRENAMIENTO

MARATON: 2/2

-Como que una parte de nosotros? -dijo Alex.

¿Qué está pasando? intercambie miradas con Matheo quise pararme pero senti un pinchazo en mi cuello y todo se puso negro.

(...)

Comencé a escuchar ruidos, voces y cómo mueven cosas a mi alrededor estoy echada en algo duro y frío, abrí poco a poco mis ojos pero tengo la vista un poco nublada y mis oídos ligeramente tapados.

Pase mi mano por mi cara y comencé a ver a mi alrededor es una habitación blanca con repisas, mire a mis pies y tenía ropa diferente a la mía.

-que carajos...-dije con la voz ronca en un susurro.

-ya están despertando.

mire a un hombre parado en la entrada vestido tambien de negro, alto y fuerte.

Un grupo de hombres entró a la habitación, Theo y Draco también comenzaron a despertar, me incorporé y un dolor agudo se hizo presente en mi cuello por lo que hice una mueca apretando la zona.

-t/n...-draco se levantó con dificultad de la camilla- estás bien?

Se acercó a mí y yo baje de la mía

-si...donde estamos?

-chicos...

-Theo estas bien? -me acerque.

-Me duele el cuello...

-Caminen -dijo uno de los hombres.

-¿Quienes... son ustedes? -theo se puso de pie.

-ustedes estarán aquí por un tiempo, órdenes de voldemort y sus padres.

-que nos van a hacer? -dije seria.

el hombro sonrió por mi comentario.

-entrenarlos

dos hombres nos agarraron a cada uno y nos empezaron a sacar de esa habitación.

-¡no la toquen! -draco intentó zafarse.

le dieron un golpe en el estómago.

-¡Quédate quieto niño!

-no lo gopees idiota! -exclame.

El hombre volteo su cuerpo y quedó frente a mi acerco su cara a la mía trague saliva pero no quite la vista.

-tienes carácter... Voldemort no exagero -dijo sonriendo.

Yo lo mire con asco y él puso su mano en mi mandíbula.

-ten cuidado -dijo Theo mirando serio al hombre.

El hombre examinó mi rostro y luego miró a Theo

-¿Es tu novia acaso?

-es mi amiga así que deja de tocarla.

Draco seguía recuperando el aire por el golpe.

-claro -sonrió y dejó de tocarme.

-Llevenselos.

Pensé que nos llevarían al mismo lugar pero ellos tomaron un camino diferente.

-no esperen...-dije intentando quitar su agarre.

-los hombres están en un área diferente, los verás cuando tengan una orden de afuera.

Pasamos por unos pasillos oscuros con algunas puertas donde se escuchaban voces y en otro simplemente golpes.