Capitulo 32.

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Justin puso los ojos en blanco una vez mas. Ariana se lo había pasado tirándolo del brazo de una tienda a otra todo el día, tanto era que el juraría que tenia el brazo marcado por una uñas. Justin sonrió cuando entraron a una de sus tiendas favoritas, y al parecer todo el aburrimiento se le paso. Lencería femenina.

- Mira, Justin.- Ariana tomo un sostén de lencería erótica y las coloco sobre sus pechos.- ¿Como me queda?- dijo, simpática.

- Se te ven estupendos, cariño.- dijo un chico que pasaba por ahí, al mismo tiempo que le sonreía traviesamente.

- Gracias.- dijo ella y se quito rápidamente el sostén para dejarlo en su lugar.

Justin observo al chico desaparecer por la sección de ropa interior masculina. Endureció la mandíbula y de repente sintió la necesidad de querer ir a donde el y torcerle el cuello. Aun así, se contuvo. Miro a Ariana quien estaba entretenida viendo ropa. Era tan inocente, y se pregunto que si es que era conciente de todas las miradas masculinas que estaban sobre ella. Ariana se agacho para recoger una prenda que se le había caído cuando Justin encontró a un chico mirándole el culo. 

- A la próxima que te vea mirándole el culo, te rompo la cara por cabrón.- mascullo Justin y cogió a Ariana del brazo, obligandola a que soltara la ropa que tenia en las manos y sacándola de la tienda antes de que perdiera toda su paciencia. 

- Justin, no me agarres tan fuerte que me duele.- se quejo ella.

- Ya, lo siento.- la soltó.- pero es que no me gusta que te miren tanto. Cualquier hombre mataría por tenerte en su cama.

- No te preocupes, sabes que el único hombre que me podrá tener en su cama eres tu.- dijo y se paro de puntitas para besarlo suavemente en los labios.

La mirada de Justin se volvió tierna en cuanto ella lo beso ¿Es que Ariana no se daba cuenta de lo que producía en los hombres?

- Eres una bruja.- gruño el sobre sus labios.

- No soy ninguna bruja.- dijo ella, inocente. Preciosa. Al mismo tiempo que curvaba su labio inferior hacia fuera.

- Si, lo eres. Una bruja que me tiene hechizado.- dijo y capturo sus labios con los suyos.

Ariana suspiro entremedio del beso, enamorada. Se sentía hermoso poder besarlo en publico y que nadie los mirara mal. Añoraba con que el día que le dijera a su papa sobre su relación el se lo tomara bien. Aun que claro, sabia que seria algo imposible. Pero debía de hacer el intento. Lo amaba y no dejaría que nadie lo alejara de el. Justin rompió el beso y le regalo una sonrisa a Ariana, una de esas sonrisas que lograban derretirle el corazón.

- Ya se esta haciendo tarde y le prometí a Monica llevarte a casa temprano.- tomo su mano y entrelazo sus dedos.- vamos antes de que oscurezca.

Ariana sonrió y juntos caminaron hacia la salida del centro comercial.

Un tio sucio [Justin Bieber & Ariana Grande]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora