Competencia [SuLay/LayHo] [TERMINADA]

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"Pasajeros con destino a Seúl, Corea del Sur. Favor de abordar por el andén 5".

Esa era su señal. Su vuelo y su tortura. Yixing aún no entiende por qué debe viajar junto a JongDae. Se supone que su compañero de asiento sería BaekHyun, como siempre. Pero no, resulta que el carismático amigo de JunMyeon se las había ingeniado para cambiar asientos con su copiloto, dejándolo así, sentado a su lado.

Y por supuesto, BaekHyun debía viajar en compañía de MinSeok.

Yixing ya había sufrido bastante en su corta estadía en Balí, Indonesia. Lo único que necesitaba era un tiempo de paz, alejado de las carcajadas de JongDae, de sus chistes mal contados y de su parlanchina voz. Quería descansar y no torturarse viendo y escuchando a JongDae en todo el viaje.

Ya dentro del avión y con el desorden andante que representaba JongDae, Yixing se resignó a tener un viaje tranquilo. JongDae se las ingenia para tomar el asiento cerca de la ventana, así podría molestar al piloto.

Ambos han tomado asiento ya, escuchan atentamente las indicaciones de las aeromozas y esperan a que el vuelo inicie. JongDae piensa por ese rato si es buena idea hablar con Yixing de todo lo que tiene atorado desde que JunMyeon decidió tener una relación.

No lo mal entiendan, JongDae sabe de sobra las noches en las que JunMyeon lloró y también, sabe las horas en que su amigo quedó perdido en sus pensamientos. Sabe al derecho y al revés, todas las inseguridades que su amigo coleccionó en todo ese tiempo y claro está, también sabe lo vulnerable que es JunMyeon ante las palabras bonitas y las caricias simples.

Con sutileza —esa que no posee— JongDae gira en su asiento hasta quedar más o menos frente al piloto, quien por la sorpresa lo voltea a ver, esperando algunos gritos o en su defecto, algunos golpes.

—Escucha, Yixing —el mencionado asiente, tragando saliva seca de su garganta—, quiero ser claro contigo. No es nada personal todo lo que he hecho para arruinar tus momentos románticos con JunMyeon.

Yixing no sabe si creer o no.

—A decir verdad, solo quiero hacerte ver lo que soy capaz de hacer —no es nada nuevo para Yixing, aunque JongDae no se lo dijera, él ya sabía eso—, vi cómo JunMyeon lloró cada una de sus noches por todas las groserías que le dijiste, olvida el golpe, las personas se componen de las patadas físicas pero jamás de las mentales.

>>Me cayó en el hígado volverte a ver —JongDae volvió a acomodarse en su asiento, cerrando los ojos y recargando su espalda en el respaldo—, una persona rota puede cometer muchas tonterías, pero jamás intentan reparar sus desplantes echándole la culpa a terceros.

Aún con los ojos cerrados, JongDae pensó nuevamente en lo siguiente que diría. No está contento, pero a la vez sí. JunMyeon parece sonreír y sigue siendo un joven de corazón noble.

—JunMyeon es muy importante para mi, es mi mejor amigo y también el tipo a quien puedo contarle guarradas y no me dejaría de hablar por eso —sonríe mientras abre sus ojos de nuevo—, lo que quiero decirte es: no le vuelvas a hacer daño. Estropear tus citas no es nada con lo que podría hacer si JunMyeon vuelve con los ojos llenos de lágrimas.

>>Sea lo que sea que pasó en ese tiempo, trata de arreglarlo. Si tu pasado vuelve, sería una prueba que deberás superar. Lo amas, ¿no es así? —Yixing asiente, no tiene voz en ese momento para responder—, él te ama también. No seas un patán de nuevo.

Terminando la oración, JongDae se acomoda una vez más, esta vez cruza sus brazos y vuelve a cerrar sus ojos, quiere descansar. Mientras tanto, Yixing razona las palabras que le acaban de decir. JongDae no lo odia, pero tampoco brinca de alegría por tenerlo cerca. A veces piensa que, no solo debe arreglar bien su relación con JunMyeon, si no que también deberá ganarse la confianza de JongDae.