—Me debes una salida como los amigos de guarradas que somos.
Reclama JongDae a primera hora de la mañana. JunMyeon tiene las manos ocupadas, intenta realizar un buen desayuno y el hecho de que le están reclamando infantilmente, lo tiene desubicado.
Han pasado dos días desde el encuentro sentimental con el tío de Yixing, en ese tiempo ambos han estado mimosos, parece como si las personas y el entorno desaparecieran únicamente para ellos. De igual manera, su relación y comunicación se ha reforzado, JunMyeon sigue teniendo sus múltiples desacuerdos mentales, la voz y confianza que emana Yixing de su cuerpo, le han quitado poco a poco las inseguridades.
Yixing en estos dos días reafirma su seguridad al enfrentar su pasado, le podrían poner a su padre de frente y esta vez —después de haber llorado y sacado todos los sentimientos contenidos—, le dirá a su afín de genes que el universo en el que viven es diferente, que las metas que tienen son tan distintas como la forma de sus ojos.
Pero ahora, JongDae recargó sus codos en la isla de la cocina, esperando con las cejas fruncidas alguna respuesta. Intenta parecer molesto, pero en realidad su cuerpo desea saber lo que ha pasado dos días antes. Su gusanito sobreprotector se está secando y teme que esta vez les dé el espacio a esos dos pilotos mimosos.
Si de la boca de JunMyeon sale un: he confiado plenamente en él. JongDae dará por terminada su travesía de hacerle la vida imposible al chino... o al menos intentará no hacerlo tan seguido, la verdad es que, en esos días no ha podido meter mi las narices. El espacio entre JunMyeon y Yixing es tan escaso que su espacio vital reclama un poco de aire, además de que es considerado y no quiere arruinar el ambiente agradable con sus comentarios fuera de lugar.
Extraña un poquito hacer rabiar a alguien.
—¿Entonces?
Insiste. JunMyeon ha terminado de cocinar y suspira un poco frustrado. No le quiere negar la salida a su amigo, claro que necesitan su tiempo de plática a largo plazo. Pero está preocupado por Yixing, siente que su pareja tiene los sentimientos aún revueltos y no puede dejarlo solo. Puede que el chino no haga una locura, pero la mente en las personas sensibles juega un papel importante, JunMyeon no quiere que Yixing piense mucho las cosas.
El único que piensa qué hacer es JunMyeon, se enfrasca tanto en intentar darle una respuesta a su amigo que no nota cuando Yixing hace presencia en la cocina. El chino ha escuchado el reproche de JongDae y aunque han tenido unos pequeños conflictos, quiere agradecerle a ese revoltoso todo lo que ha hecho por él los últimos tres días. Desde su regreso de aquella plática sentimental, JongDae lo ha ayudado a que los días sean más ligeros, hasta el punto en que Yixing extraña solo un poquito los comentarios fuera de lugar.
—Ve, no te preocupes por mí.
Expresa Yixing con una sonrisa leve cuando llega al costado de JunMyeon, este último lo mira con la duda plantada en su rostro, no está seguro si sea buena idea, pero Yixing acaba de hacer ademanes con la cabeza en un claro: "No hay para objeciones, ve".
—De acuerdo —no está convencido, pero no puede hacer mucho en ese momento—, podemos salir hoy.
JunMyeon mira con una sonrisa extraña a su amigo, quien está planeando los mejores lugares a los cuales ir y vengarse de su insensible piloto. Lo ha abandonado por mucho tiempo y tiene cosas que contar, así como quiere escuchar lo que JunMyeon tenga que decir. Necesitan ese tiempo de Señoras Chismosas.
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Competencia [SuLay/LayHo] [TERMINADA]
Fiksi PenggemarSon los Pilotos y Copilotos más confiables, los mejores de su generación. Atentos, guapos, carismáticos y sobre todo los más solicitados. Una chusca, dramática y tierna historia de amor entre dos pilotos que no han dejado de amarse a pesar de los a...