Heartstopper/Harry Potter Episodio 2

Parte 15.- Oso blanco

Los pasillos del dormitorio de mujeres estaban oscuros. El lugar perfecto para que los Dementores buscaran alguna indefensa presa. Una presa que evidentemente encontraron.

--¡Expecto Patronun!

--¡Expecto Patronun!

Y en un coro perfecto, un pavorreal y un lobo llenos de luz fueron liberados del alma de sus respectivos magos. El lobo se abrió paso con sus mandíbulas golpeando a cada uno de los Dementores que comenzaban a aparecer desde en el interior del castillo.

--Tengo que encontrar a Nick

--Charlie. ¡Si fuera tú, me preocuparía más por sobrevivir primero! –Tori trataba de controlar su encantamiento, pero todavía no podía acostumbrarse a la nueva varita que Ron Weasley le había regalado.

Y como si el arma definitiva contra la oscuridad no hubiese funcionado, varios de los atacantes ahuyentados le cerraron el paso nuevamente a Charlie y Tori.

--¡Jamás había visto a tantos! ¡Y jamás los había visto tan coordinados! –dijo Charlie manteniendo aún su Patronus con dificultad.

Ambos jóvenes trataron de correr hacia la dirección opuesta, pero ésta estaba también bloqueada por las temibles entidades, cuya oscuridad eclipsaba cada vez más el pequeño faro de esperanza que el Encantamiento Patronus les había brindado alguna vez.

--¡Cuidado!

Una siniestra mano gris estuvo a punto de tocar la cara de un distraído Spring. A punto de tomarlo como una víctima más.

El pavorreal blanco dirigió su energía lo más rápido que pudo para proteger al muchacho de ese atacante.

--Charlie... no sueltes mi mano. Tu hermana está aquí contigo ¿Me escuchaste? ¡Tu hermana está aquí contigo!

Y cuando el resto de los Dementores estaban a pocos metros de alcanzar a los dos muchachos, una gigantesca luz apareció en el otro extremo del pasillo. Muy intensa. Tan resplandeciente que cegó por un momento la visión de Charlie y Tori.

La luz se atenuó poco a poco hasta adquirir la forma de un corpulento oso, cuyos músculos alejaron con agresividad a todas las entidades oscuras.

El oso blanco usó sus extremidades para desgarrar levemente las túnicas de los Dementores; usó su cuerpo para abalanzarse sobre aquellos frente a él. Y de esta manera purificó todo el pasillo, alejando a aquellos seres de manera definitiva.

--¿Me extrañaste Charles? –unos tacones resonaron por toda la penumbra al unísono de esa voz femenina.

Una elegante mujer de cabello rubio y atuendo negro se dejaron ver finalmente gracias a la luz nocturna.

--¿Profesora Myers? –a pesar de sus antecedentes con la mujer, Charlie no pudo evitar sonreír y lanzarse a darle un gran abrazo.

El muchacho estrujó con sus brazos a la aurora igual que lo haría con su madre. Sorpresa, eso fue lo que invadió a la mujer por aquella reacción ante la que se sentía incómoda; pero aun así, se permitió disfrutarla.

--¿Y ese afecto?

--Supongo que significa... no sé. ¿Gracias por salvarnos el trasero?

--No digas "trasero" frente a mí ¿quieres? –dijo Hellen Myers sacando de su bolsillo un pañuelo para limpiar su varita. –Por cierto, esos fueron encantamientos impecables. Creo que no pude haber dejado mi anterior varita en mejores manos que las tuyas... Charlie.