We shouldn't (Billie Eilish y Tu) G!P

Capítulo 43

________ POV

___: - ¿Estás segura de que estás bien?

Tomé el plato de Billie que estaba frente a ella.

Apenas si había comido algo.

Bill: -Sí. Solo estoy cansada. -Llevaba el cabello recogido, se frotó la parte posterior de su cuello.

___: - ¿No te gustó el pollo?

Bill: -No, estuvo genial. Yo mmm... comí con Lucas más temprano. No lo pensé.

Siento no habérmelo terminado cuando pasaste por todo este trabajo.

Puse nuestros platos en el fregadero e incité a que Billie apartara un poco su silla de la mesa. Sentándome en su regazo, acaricié unos mechones sueltos de su cabello.

___: -Está bien. No me importa en absoluto. Es solo que parece que... esta noche estás en otro lugar.

Bill: -Lo siento.

___: -Deja de disculparte. -Me puse de pie y le ofrecí mi mano-. Vamos. Estás cansada y has estado frotándote ese cuello desde que llegaste. Déjame quitar esos nudos.

Billie tomó mi mano y la llevé hacia mi dormitorio. Se quitó los zapatos y se sentó en la orilla de la cama.

Entré en el baño y tomé la botella medio vacía de aceite para bebé que mantenía debajo del lavabo para mi piel seca.

-Quítate la playera, así no la lleno de aceite.

Cuando observarme poner aceite en mis manos no provocó ningún comentario libidinoso, supe que lo que fuera que la estuviera molestando era más que dolor en el cuello y estar cansada. Me apoyé sobre mis rodillas detrás de ella y comencé a masajear el aceite para bebé en su piel.

Su barbilla bajó hasta su pecho cuando pase los dedos por su piel.

-No estabas bromeando. Estás tan tensa.

Es como un nudo gigante aquí atrás.

Billie hizo un sonido que fue una mezcla entre un gruñido de placer y uno de dolor cuando enterré mis dedos más profundo en su piel.

- ¿Te sientes mejor?

Asintió.

Después de aflojar los músculos en su cuello, imaginé que aflojaría otro músculo.

Así que me estiré alrededor de sus pechos y desabroché sus vaqueros mientras besaba la parte posterior de su cuello.

Luego me bajé de la cama y me paré entre sus piernas antes de dejarme caer sobre mis rodillas.

El sonido de la cremallera de los jeans de Billie hizo eco por la habitación.

Estirándome hacia sus pantalones, acuné su miembro y dejó salir una audible y temblorosa exhalación.

Pensé que era el sonido de su auto control perdiéndose, pero cuando levanté la mirada, encontré sus ojos cerrados y su rostro retorcido con dolor.

- ¿Bill? -Me aparté-. ¿Qué pasa?

Sus ojos se abrieron.

Bill: -Nada.

___: -No me digas que no es nada. Luces tan molesta.

Se puso de pie y dio algunos pasos alejándose de mí.

Bill: -Lo siento.

___: -Deja de decir eso. ¿Qué está pasando contigo?

Esperé en silencio a que dijera algo, pero simplemente siguió tomando profundas respiraciones regulares, dentro y fuera.

Parecía que estaba intentado recobrar la compostura, recuperar su control.

Billie pasó una mano por su cabello.

Bill: -¡Miiiiierda! Sonaba tan enojada, pero podía decir que fuera lo que fuera, estaba enojado consigo misma, no conmigo.

___: -Háblame.

Se paseó unas cuantas veces y luego se sentó de nuevo en la orilla de la cama, su cabeza en sus manos y sus dedos jalando de su cabello.

Me arrodillé enfrente de ella.

- ¿Bill?

Observé su garganta cuando tragó Y luego sus hombros comenzaron a sacudirse.

Al principio, pensé que se estaba riendo, algún tipo de risa maniaca que necesitaba salir porque era eso o derrumbarse y llorar.

Pero entonces, levantó la mirada.

Y vi sus ojos llenarse con lágrimas contenidas.

Mi corazón se detuvo.

No se estaba riendo; estaba llorando en silencio, haciendo todo lo que estaba en su poder para no dejarlas salir.

___: -Oh, Dios, Billie. ¿Qué pasa? ¿Qué sucedió?