Alma Gemela |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤 ✔

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                       Yoonhee;

—No puede ser que te haya criado desde que eras un bebé y vengas a querer más a Jungkook que a mi —crucé mis brazos viendo a Yangyang quién no dejaba de jugar con Jungkook en la sala.

—No estés celosa. Él te ama. Lo que a mi más —respondió Jungkook divertido. Rodé los ojos y negué sonriendo.

—¿De verdad no vas a quedarte a desayunar? —pregunté yendo hacia el sofá donde estaba sentado. El deja a Yangyang sobre el piso y este va corriendo hacia uno de sus jueguetes con forma de hueso.

—Tengo que...resolver algunas cosas con mi manada —contestó—. Y otros asuntos relacionados a...ti.

—A mi —murmuro mirándolo y él asiente viendome.

—También tengo que...presentarte ante ellos —continúa y comienzo a toser de momento—. ¿Quieres que te busque agua? –me mira Jungkook preocupado.

—N-no —toso de nuevo y trago—. ¿P-presentarme?. Ya m-me conocen. No es necesario presentarme –niego con mis manos repetidas veces.

—Ellos te conocieron por otras personas. Pero te conoceran por mi. Por quién realmente necesitan conocerte —responde.

—Jungkook, ellos no me aceptaran —contesté—. Deben de tener muchas razones para no hacerlo. No soy como tú, fui quien causó que te pusieras mal aquella vez-

—Shh —el puso su dedo índice en mis labios deteniendome—. Eso no importa.

—¿De verdad que no? —lo miré no tan segura. Suspiré poniendo algunos mechones de mi pelo detrás de una de mis orejas—. La otra vez...debo confesar que me dió un poco de miedo.

Él alzó una ceja y se acomodó más de frente hacia mi, subiendo una pierna sobre el sofá mirándome.

—Todos me miraron un poco extraño —continué explicando—. Sobre todo...el tal Yoongi-

—Yoongi...—asiente él lentamente.

—Sí —musité—. Uhm. De momento temí que todos se convirtieran en lobos y me atacaran. Fue una sensación horrible. En serio.

—Yoonhee —el se inclina un poco hacia mi y pone cada una de sus manos sobre mi cintura; cada una en cado lado—. Nadie de mi manada va a hacerte daño.

—Pues creo que me odiaron mucho en ese entonces por como te estaba haciendo sentir —respondí.

—Tú eres quien me hace feliz —contesta—. Es contigo con quién quiero estar. Con quien me voy a casar. Y a quién voy a amar para siempre –los fuegos artificiales se activaron automáticamente en mi interior–. Cuando ellos sepan eso, estará todo bien.

—Ellos son tu familia —comento—. Te quieren mucho. Sobre todo...Jimin, Hoseok y Tae. Y bueno...Yuki —sonreí al final.

—Sí. Nuestra amistad es...muy buena. Escucha cariño —comienza a acariciar mi cabello despacio mirándome—. Acerca de Yoongi –hace una pequeña pausa–. No pienses que es alguién odioso. Es como un insoportable hermano mayor. Su padre y el mío eran amigos. Murieron casualmente el mismo día –hizo una pequeña mueca como si recordar el momento aún fuera incómodo–. Yoongi es dos años mayor que yo. Siempre me cuidó. Aunque no sea el alfa, él siempre ha sido quién me ha ayudado en todo y ha estado conmigo desde pequeños. Igual que los demas pero él se lo toma mas a pecho. Si es así contigo es solo...porque prometió a mi padre que me cuidaría como un buen hermano. Pero en el fondo estará feliz por saber que tu logras hacerme sonreír. Así que no te preocupes por él.

—Tú lo conoces –murmuré—. Está bien.

—Bueno. Debo irme ya —se inclinó mas hacia mi besando mi frente—. Mañana, te presentaré a la manada. Aunque si no estás preparada-