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                          Jungkook;

—¿Que quieres saber? —giré mi rostro hacia ella para verla. Ella levantó el suyo mirándome también.

—¿Desde que edad...comenzaste a convertirte? —preguntó.

—Mhm...—hice memoria yendo a mi pasado—. Supongo que...los primeros años de mi vida; como hasta los cinco, fui totalmente un niño. Pero a medida que iba creciendo, sentía como que ese no era totalmente mi cuerpo. Y pasó. Estuve mucho tiempo siendo lobo, hasta que pude cambiar de forma convirtiendome en humano y también en lobo.

—Es decir que...¿tus padres lo eran?.

—Sí. De hecho...mi madre era completamente humana —contesté—. Mi padre si era mitad lobo. Supongo que todo lo heredé de él.

—¿Cómo terminaste siendo alfa? —continuó ella con sus preguntas y me resultaba dulce verla así. Me atendía detalladamente y yo me estaba conteniendo para no besarla a cada segundo.

—Mi padre era el alfa —respondí—. Yo era su único hijo. Cuando...murió tuve que encargarme yo. Y aquí estoy –solté una risita y ella sonrió también–. ¿Los viste, cierto?. A todos...ellos –dije refiriendome a los que conformaban mi manada.

—Sí —asintió ella mirándome—. Pero no creo que les caiga bien.

—Es que ellos –apoyo mi brazo en la almohada y dejo mi cabeza encima de la palma de mi mano poniendome de frente hacia ella viendola mejor—, ellos están acostumbrados a lo antiguo.

—¿Y eso debería ser....?

—Que tu deberías ser una omega —respondí yo mirándola—. Pasó también con mi mamá. Era rechazada. Pero la terminaron aceptado y...la querían mucho.

—Se supone entonces, que si soy una omega, ¿puedo estar contigo? –alzó una ceja mirándome.

—Sí y no.

—¿Sí y no? —me miró incrédula. Sonreí divertido y llevé mi mano a su cabello para acariciar este.

—Sí lo eres....puedes estar conmigo desde la perspectiva de ellos —pausé por unos cortos segundos—. Y aunque no lo seas, eso no va a impedir que te quiera.

Ella se me quedó viendo con esos bonitos ojos miel y algo sonrrojada y le sonreí para besar su frente.
—Dios...aún no puedo acostumbrarme a que seas tan directo —susurra mientras jugaba con la tela de mi camisa.

Volví a reír y ella hizo un puchero.

—¿Ya no hay más preguntas? —intrigué curioso tratando de no volver a reír.

—Respecto...a nosotros —retomó sus palabras volviendo a mirarme—. El lazo... ¿Se supone que, soy tu alma gemela?.

—Nosotros...reconocemos a esa persona con la que queremos estar para siempre. Es simplemente...mirarte y ya saber que quiero estar contigo —dije sin dejar de mirarla—. Es como si hubiera encontrado esa parte que me faltaba. Justo eso me pasó cuando por poco me chocas.

—¡Ni siquiera sé de donde saliste! —exclamó ella y solté una risita.

Mordí mi labio inferior. —Mhm –sonreí divertido–. Pero fue eso lo que me pasó. Cuando...te ví. Que te acercaste y me preguntaste si todo estaba bien y si no me pasaba nada. Joder. Juro que todo mi sistema se detuvo. Y eras tan...malditamente pequeña –me incliné hacia ella y ella sonrió encogiendose mientras me miraba. Besé rápidamente sus labios–. Solo sentí que eras tú.

—U-um...—ella raspó su garganta y estaba totalmente roja de la vergüenza y la tímidez—. Estuviste persiguiendome después de eso, ¿verdad?.

—No —dije—. Nunca te seguí.

Alma Gemela |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora