Takara ha vivido de forma complicada desde que nació, y las circunstancias la llevaron a tomaron a tomar medidas drásticas.
El único problema será si ella quiere hacerlo.
Si decide luchar o huir será completamente su decisión.
Hitoshi Shinso X OC
Ni...
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— Bien, eso debería ser suficiente. — suerte que Takara no sale a ningún lado sin algo para curar heridas inesperadas y pudo detener la hemorragia de su pierna. — Ahora, ¿hacia dónde debería ir para no encontrarme con nadie más?
Cualquier dirección que sus instintos le digan es buena, pero mientras iba caminando se apareció un humo púrpura que por supuesto ella evitó respirar, aunque no podía aguantar la respiración para siempre.
¡Se ha identificado a uno de los objetivos de los villanos! — se volvió a escuchar. — ¡Es el estudiante Kacchan! ¿Escuchaste, Kacchan? ¡Evita pelear y no te quedes solo!
Iba a ignorar el hecho de que le dijeron Kacchan porque si no se iba a reír. La buena suerte fue que se encontró pronto con una cara conocida; Yaoyorozu junto a Awase de la clase B, quienes traían máscaras de gas.
— ¡Fukui, que alivio que estés bien! — Yaoyorozu le dijo. — Tu pierna está herida, pero veo que lo manejaste. No has podido respirar por un tiempo, ¿cierto? Voy a crear una máscara para ti.
— ¿Takara? — una voz ajena a la conversación interrumpió, haciendo a la antes mencionada soltar todo el aire retenido para responder.
— ¿Tú lo conoces? — Awase le preguntó.
— Um... ¿papá? — fue todo lo que ella pudo decir en el momento.
— ¡¿Es tu papá?!
— ¿Qué haces aquí?
— ¿Qué otra cosa voy a estar haciendo? Te estaba buscando.
— Fukui, no sé cómo él puede respirar esto sin desmayarse, pero tú no deberías. — le advirtió Yaoyorozu. — ¿Te sientes bien?
— Yo sólo... ah... ¿alguno me pude pellizcar? Normalmente sólo veo a mi papá cuando duermo en mis recuerdos.
— Sé que todo es muy repentino, pero no vine a hacerle daño a nadie; sólo buscaba encontrarme contigo.
— ¿Atacando el campamento de un montón de estudiantes?
— No fue idea mía.
— Fukui, ¿estás bien? — la voz de su compañera ya se estaba empezando a escuchar distante. — ¿Fukui? Estás perdiendo la conciencia por el gas venenoso; no respires durante un segundo. — le puso una máscara de gas, pero ella igual se desmayó. En realidad ninguno estaba seguro de si fue el gas venenoso o el shock de encontrarse con su padre, quizás una combinación de ambos, pero perdió se desmayó con rapidez.
— Bueno, — el hombre continúo hablando. — se los voy a pedir de forma pacífica para probar que no vengo a herir a ninguno de ustedes. Necesito que me den a mi hija.
— No. — Yaoyorozu se apresuró a responder. — Aún si es su padre, vino aquí con un grupo de villanos. Como su compañera y amiga que se preocupa por su seguridad, no puedo entregársela.
