Mafia Jungkook. Mi Vida, Mi Amor

15

Corea del Sur
Seul

En una de las habitaciones de la gran casa que tenía Park Jimin en la ciudad de Seul se encontraba él y su hermana Yangmi.

—¿A qué se debe tu visita? —le dijo su hermano a ella— es raro que te atrevas a venir aquí.

Era peligroso que la vieran con él, cada uno pertenecía a mundos diferentes y contrarios entre sí, pero la ocasión lo merecía. Ellos se veían de vez en cuando en sitios apartados y estratégicos.

—Quería pedirte un favor, ¿Sabes que Yangmi junior ha ingresado en la base militar Hwa-rang?

—Vaya, eso me alegra hermana, al final será una mujer valiente como tú lo eres —le puso una sonrisa sincera.

—Eso espero, pero me preocupa que esté tan lejos y sola, su temperamento es horrible y no sabe tratar con las personas —ella la conocía muy bien.

—Los muchachos de ahora son demasiado volátiles, prendes la mecha y explotan al momento, pero no te preocupes esa muchacha es fuerte y no dejará que le hagan daño...... aunque ella empiece la pelea —empezó a reír Jimin.

—No te rías, vengo a pedirte que si tienes a alguien por allí la vigilen desde lejos, no quiero que la ayuden con nada, pero que si en algún momento está en grave peligro le ayuden —le dijo Yangmi con ojos llorosos.

—Hermana no te preocupes, haré lo que me pides así que no sufras, a ella nunca le ocurrirá eso que piensas —echó su cuerpo y su mano hacia adelante para acariciarle la suya que la tenía encima de la mesa.

—No quiero que ningún hombre la toque sin que ella lo decida antes, no quiero que la humillen de ese modo ni la maltraten o lleguen a herirla —tragó fuerte.

—Nunca dejaría que a mi sobrina le hicieran daño, sabes lo que sufro desde siempre por no haberte ayudado a ti en su momento y ahora te pagaré mí falta con ella. No tienes que decir nada más, ahora después investigaré para ver quién de allí puede ayudarnos —le sonrió.

—Gracias Jimin —le puso una sonrisa tierna.

—Cambiando de tema, ¿Sabes con quién estaba hablando cuando has venido?

—No, no lo sé —dijo ella tan normal.

—Con Jeon —Jimin sabía lo que iba a ocurrir cuando dijera ese nombre, pero es que siempre esperó que los dos estuviesen juntos.

Ella esbozó una pequeña sonrisa pero se mantuvo erguida sin demostrar lo que su cuerpo sentía, nunca lo había quitado de su pensamiento por muchos años que hubieran pasado, aunque el rencor no la dejaba sacar ese sentimiento.

—¿Sí? Mira que bien —aunque quería esconder lo que sentía en ese momento se le notaba el enfado.

—¿No quieres saber dónde está?

—No, no me interesa lo más mínimo —dijo poniendo su cara en alto.

—Luego te quejas de Yangmi junior —reía Jimin — es igualita a tí.

—Tengo que irme —se levantó deprisa bastante seria.

Su cuerpo estaba experimentando emociones que nunca quiso que nadie viera.