Mafia Jungkook. Mi Vida, Mi Amor

29

Los dos estaban entre los pedazos de pared rocosa que llenaban el suelo del lugar, arena y piedras los rodeaban, había soldados muertos y otros heridos cerca de ellos, los que habían podido sobrevivir ayudaban a los demás.

Se incorporó Jungkook y levantó a Yangmi para pegarla a él, tocó su cuerpo desesperado intentando ver que no tenía ningún daño importante, la separó y la miraba enfadado cuando se dió cuenta que nada le pasaba, sus facciones duras estaban cerca de su rostro, su actitud altiva lo estaba cansando aunque la quisiera más que a su vida, con sus dedos retiró el polvo que tenía entre sus labios, estaba con los ojos cerrados.

—!Yangmi despierta! —le gritaba y la zarandeaba hasta que ésta abrió los ojos, él respiró aliviado.

Estuvo aterrado por un momento, podía haberle pasado algo por su cabezonería, así que aunque preocupado por ella su enfado no podía esconderlo. ¿Porqué no le hacía caso nunca? Estaba cansado de su actitud desafiante.

Cuando la vio mirarlo de esa forma que tenía desde un principio aunque estuviera derrotada lo hizo entender que no cesaría en su empeño de salir corriendo en busca de su hija, cogió su rostro con una mano por la barbilla y le apretó las mejillas con  rabia.

—¡¿Quieres morir?! Pues estoy a punto de hacerlo yo mismo con mis propias manos —le dijo enfadado— dejé que por tu actitud mi vida cambiara, dejé que por tu carácter me hablases de forma incorrecta y dejé hasta que mi sentimiento por tí me hiciera un completo Imbécil a ojos de todo el mundo —su respiración y su mirada oscura hicieron que Yangmi se sintiera intimidada— ¿Es tan difícil para tí esperar a que yo solucione ésto? ¿Tan poca cosa me consideras?

—Es mi hija —dijo intentando moverse pero fue inmovilizada por él de nuevo.

—Lo sé ¿Y? Eso no te da derecho a poner mi vida en peligro ni la de nadie de éste lugar, todos han venido a salvarlos, estoy cansado de tener que estar inquieto cuando me encuentro a tu lado  porque tú no te estás quieta, no haces caso de nada de lo que te digo ¡Por el amor de dios Yangmi! —le gritó— ¡Confía en mí por una puta vez en tu vida!

Ella entendiendo su enfado asintió bajando la cabeza, tenía que valorar al hombre que sabía de sobra quién era de una vez por todas, alguien fuerte de cuerpo y también de carácter que siempre había velado por ella cuando estaba a su lado.

Después de gritarle eso y ver que se rendía a él aflojando su cuerpo miró a su alrededor sin dejar de estrujar sus mejillas con su gran mano.

Era todo un desastre lo que los rodeaba, la muerte se cernía por todos lados.

La subió cuando ya se había levantado él y la hizo chocar con sus labios. La besó sin piedad, la devoraba como si fuese la última vez que iba a hacerlo, la soltó cuando vio oportuno después de morderle el labio y mirándola con esa impetuosidad que llevaba tiempo sin hacer le sonrió, miró después a un lado de la cueva con rabia.

—¡Yoongi! —gritó buscando al chico que lo ayudaría.

—Sí.... señor —apareció éste ante él y se cuadró.

Se puso delante Jungkook sin soltar a Yangmi de la mano.

—¿Te enseñó tu padre la fidelidad hacia la persona que te encomienda uno de la cúpula? ¿Sabes el significado de la familia dentro del clan?

—¡Sí señor! Mi padre me enseñó que debo dar mi vida y luchar hasta el último suspiro por la persona que está ya ligada a mí después de una orden —dijo con voz potente todo erguido.

Entonces tiró de Yangmi y la puso delante, estaba entre los dos.

—Ella es la hermana del jefe de la mafia Park Jimin, es tu única existencia en éste momento, si alguien le quiere hacer daño te lo harán a tí primero, tu cuerpo es su escudo y tu vida vale menos que la suya ¿Estás bien con eso? —le puso la mano en el hombro y lo miró con sus ojos negros buscando fidelidad al igual que su padre hizo en el pasado.

—Ese es mi lema ahora, mi padre me contó quién es usted y para mí es un orgullo cumplir sus órdenes, ella es y será lo primero para mí en éste momento, su hermano es alguien al que idolatro, vaya tranquilo que nadie la tocará, mataré a todo el que se acerque a nosotros —Yoongi se cuadró de nuevo ante él, ese acto era para demostrarle el respeto que le tenía.

—Eres cómo tu padre, valiente y de buen corazón, confío en tí muchacho —le sonrió y se dirigió a Yangmi, la miró serio — te quedas a su lado, no te moverás por nada, serás su sombra y si se te ocurre hacer una tontería de las tuyas te las haré pagar sin piedad cuando vuelva ¿Entendido?

Ella suspiró y asintió, no podía hacer otra cosa, pondría en peligro a todos si seguía pensando que era invencible.

—Pronto estaré aquí, los traeré con vida y saldremos todos juntos —se acercó a su oído— y por lo de Amina no te preocupes, hablaré con ella y tendrá que entender que mi mujer has sido siempre tú, que a la que amo es a tí y que nuestras vidas estuvieron entrelazadas desde que te conocí....te amo Yangmi y viviremos nuestra vida juntos, de aquí en adelante no te perderé de vista nunca más, te amo y te amaré hasta la eternidad —se separó y la miró de nuevo, la besó con fuerza otra vez y después salió corriendo al interior de la cueva en busca de los Juniors y para matar a ese desalmado que tenía que haber estado muerto desde hace mucho tiempo......