Mafia Jungkook. Mi Vida, Mi Amor

32

Jungkook partió por la mitad el bastón para solo dejar la daga incrustada en el vientre de Yangmi.

—¿Tienes miedo? —dijo ella al ver su rostro demacrado y ceniciento.

—Sí...mucho —le dijo Jungkook apretando su mano y con una expresión desencajada.

—No lo tengas...yo no lo tengo amor, te estoy diciendo..... la verdad —decía ella entrecortada demasiado quieta con su mirada perdida a causa del dolor, había sido tan altanera e inquieta siempre que verla Jungkook de ese modo lo estaba destruyendo por completo.

Él emitió un sonido de dolor que a ella la entristeció. Ella sabía que la vida se le iba, el dolor que sentía era muy fuerte pero estar junto a él la reconfortaba.

—Nos iremos juntos Yangmi, tú y yo merecemos ser felices en otro mundo.

Estaban tendidos en el suelo y los dos voltearon para verse.

—No digas eso..... tu hora aún no ha llegado, no puedo arrastrarte.... conmigo, tú no puedes acabar así, tú eres alguien especial, siempre..... lo has sido —respiró Yangmi un poco brusco porque de nuevo un dolor intenso le vino y él con angustia le acarició la cara mientras ella lo seguía mirando—tienes que vivir y estar con nuestros hijos....ellos te necesitan.

—Ellos se cuidarán el uno al otro, mi hijo ya es un hombre para cuidarse solo y sé que va a proteger a tu hija —se alzó y le dió un pequeño beso en los labios— nunca te volveré a dejar sola— se volvió de lado para quedar aún más cerca y la vio sonreir— fuiste desde el principio la chica más idiota que nunca vi, me mirabas de ese modo que mira una adolescente a su profesor, embobada y enamorada.

—¿Tan....obvia fui?

—Sí, no dejabas de mirarme de reojo a todas horas por todos los rincones de la mansión Jeon, ¿Crees que no me daba cuenta?

Ella quiso reír pero solo llegó a sonreír y él que lo entendió se acercó a su oído para hablarle.

—Mi niña tonta.... quería amarte y te amé, quería tenerte y te tuve, quería besarte y te besé —y después de un suspiro doloroso continuó— pero quise siempre protegerte y he fallado en eso, me duele tanto verte de éste modo, es tan doloroso para mí...no pude hacerte  una idea Yangmi, mi deseo era hacerte feliz desde el principio y no lo pude cumplir, perdoname amor, perdoname —besó su mejilla.

Roto de dolor después de besarle la mejilla se quedó con el rostro pegado al de ella que le hablaba bajito y sin fuerzas.

—Tú no tienes la culpa, yo te eché de mi lado por no entender lo especial que eras, todos saben quién es el mafioso, el asesino, el hombro rudo e impetuoso.....pero yo —se contrajo de nuevo y respiró fuerte después de otro dolor agudo— pero yo....he conocido al verdadero Jeon Jungkook, el que me dió el mayor amor que se le puede dar a una mujer, el que relajó su carácter para que yo lo tratara mal y de eso me arrepiento, perdóname por no demostrar lo mucho que te he amado siempre.

Cerró los ojos al sentir que algo se destruía en su interior, la sangre ya salía sin control.

Jungkook que se dió cuenta, se quitó la camisa y la llevó hasta su vientre y apretaba fuerte en la herida.

La presionaba junto a la daga que estaba aún clavada en ella, iba a sacarla pronto de ahí pero cuando lo hiciera sabía que todo habría acabado para Yangmi y aunque sabía que era un sufrimiento para ella dejarla vivir un poco más necesitaba egoístamente que lo escuchara.

—Ojalá no me hubieras conocido Yangmi...no tenía que haberte tenido a mi lado, no tenía que haberme fijado en tí siquiera, ahora estarías feliz y no que mírate —con manos temblorosas Jungkook apretaba alrededor de la herida y lloró como nunca había hecho en su vida, sus sollozos eran sonoros.

Ella le acarició la mano y cerró los ojos por un momento.

—¿Recuerdas cuando.... me salvaste de aquel tipo? —le dijo con los ojos cerrados y en un susurro, ya no podía casi hablar— ahí me enamoré.....de mi.....señor Jeon y cuando me diste tu....abrigo — esbozó una sonrisa— era enorme y tú te reías de mi estatura.

Los dos sonrieron.

—Yo me enamoré de tí el día que me dijiste que mi mala leche era igual de grande que mi cuerpo —suspiró Jungkook y puso una sonrisa— te encantaba contestarme y retarme y yo luchaba por no ir en tu busca y azotar tu trasero como te merecias —Yangmi sonrió, ese recuerdo le encantaba— lo que ocurría es que tenias solo dieciséis años, eras solo una niña —rió un poco— mi niña tonta.

Y se acercó a ella para besarla pero antes en un susurro cerca de sus labios cargado de dolor le habló, sabía que ya la muerte se cernía a su alrededor y no le quedaba mucho tiempo.

—Ahora te sacaré la daga cariño, sé que te va a doler y si yo pudiera quedarme con ese dolor lo recibiría mil veces antes que verte sufrir pero no puedo hacer nada para evitarte éste sufrimiento —ella ya no lo veía, tenía sus ojos cerrados pero lo escuchaba y sentía el calor confortable de su cuerpo que estaba pegado al suyo— después de hacerlo la voy a incrustar en mi corazón —ella se removió un poco al sentir sus palabras pero Jungkook la abrazó— shshhh tranquila mi amor, viviremos nuestro amor lejos de éste dolor que no nos dejó hacerlo, seremos felices al fin tú y yo..... Yangmi y Jungkook serán felices eternamente cariño, déjamelo a mí, no te abandonaré ésta vez, no te dejaré sola en ésto, te prometí que si tú morías yo lo haría contigo así que llegó nuestro dulce final ese que nos unirá para siempre.

Y la besó con fuerza ahogando el grito de dolor que ella emitió al sentir que el sacaba eso afilado y puntiagudo que estaba clavado en su vientre, Jungkook se separó y se subió a horcajadas en ella y vio cómo ya estaba muriendo así que sin más mirándola con sus ojos llenos de lágrimas se la clavó con fuerza en el corazón y cayó encima de su pecho, pegó sus labios en su oído para decirle sus últimas palabras.

—Ya estamos juntos tú y yo, al fin lo hemos conseguido...mi niña tonta...

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Ya está aquí mi final, ese que no sabía cómo escribir. Mis dudas eran de si montarlos en un coche impresionante y que huyeran juntos para vivir su amor, pero si lo hubiese hecho para agradar al lector no habría sido mi historia ni mi imaginación.

Espero que ésta historia no quede en el olvido y el que la lea le de una enseñanza, que en ésta vida no puede uno querer siempre hacer lo que tu carácter te mande, está bien ser autosuficiente pero nunca dejar atrás a las personas que te quieren ayudar.

Sin más me despido y gracias por estar ahí siempre, os deseo que tengáis una maravillosa vida rodeada de vuestros seres queridos.

( ❥⁠˙♡♡ Sigue leyendo el final que todos han pedido que haga....querían saber qué ocurrió con los personajes, además habrá una despedida muy especial... gracias por llegar hasta aquí (⁠✿⁠ ⁠♡♡⁠)