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Seul
Interior de la cueva

Los Juniors el día que se adentraron en la cueva andaban cogidos de la mano, Jungkook se la agarraba a Yangmi con fuerza, ella intentó soltarse al principio pero él no se lo permitió.

Cuando llevaban andado un tramo del camino, que no era muy fácil de sobrellevar por lo angosto del suelo, escucharon unas voces.

Siguieron sigilosos por no saber de quiénes e
se trataba y escondidos vieron varios hombres de nacionalidad china, no entendían de qué hablaban. Hasta que captaron a otro hablando por teléfono. Lo hacía en coreano.

—Señor sí es Jeon Jungkook, yo mismo lo he visto —jungkook junior quedó con los ojos abiertos, ¿Hablaba de su padre?

Yangmi lo miró y él puso su dedo en su boca para que no hablase.

—También hay una mujer, es la hermana de Park Jimin —ahora fue Yangmi la que se quedó desconcertada, hablaba de su madre.

Por detrás fueron descubiertos y apresados. Recibieron golpes y fueron maniatados y encerrados en una parte de la cueva, detrás de unas grandes rejas y en un habitáculo pequeño estaban los dos malheridos y tirados en el suelo.

Seul
Superficie base militar Hwa-rang

Se encontraba Yangmi viendo la escena de aquella mujer abrazada a Kendall. Saber que era la esposa de Jungkook le dolió, pero sabía que tenía derecho de estar allí, derecho porque su hijo había desaparecido y porque el que estaba en su cama era su marido. Ella solo estuvo con él la noche anterior pero esa mujer tenía todas las de ganar en éste lío amoroso.

Con sigilo salió de la habitación, cerró la puerta y se fue sin ser vista a la cocina,

—Jungkook Junior volverá pronto a estar con nosotros Amina ya lo verás —le seguía diciendo Kendall.

Ella seguía llorando cuando la puerta de la habitación se abrió, de ella salió Jungkook todo adormilado, con el pantalón del día anterior puesto y el torso desnudo.

—¡Jungkook! —gritó su mujer al verlo, corrió hacia él y lo abrazó llorando.

Él estaba desconcertado, con los ojos muy abiertos miraba por la habitación, buscaba a Yangmi que no la veía, se había levantado al no encontrarla dormida en la cama.

—Me dijiste que lo traerías a casa pronto, que eran solo dos días y ya han pasado cinco y mira, aún no aparece —abrazada aún a él lo miraba cogiendo su rostro con las dos manos.

—Amina cálmate, ya están sobre su pista, pronto lo encontraremos —le decía él pero seguía buscando ansioso con la mirada puesta por la habitación ¿Dónde estaría Yangmi?

Ella desde la distancia y escondida tras una de las columnas que separaba una estancia de otra observaba a marido y mujer. Tenia ganas de llorar y se recriminaba que no tenía potestad en aquello, no debía sentirse mal porque sabía desde primera hora que era un hombre casado, que ya no era su señor Jeon.

Ella salió sigilosa por otra puerta contigua, por la parte de atrás salió para que le diera el aire. Necesitaba poder respirar.

Se echó en la pared y alguien la saludó.

—Buenos días señora Park —era Yoongi Junior.

Mafia Jungkook. Mi Vida, Mi AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora