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— ¡Debes parar! — le exclamó un molesto Komatsu, tomándolo del brazo para estamparlo contra la pared del pasillo — ¡Tú no sientes nada por ella y ya se demostró que está limpia! ¡Dile la verdad! —.

— No... Y sueltame — le dio un empujoncito al más bajo en estatura, obligándolo a separarse de él — además ¿Por qué te interesa tanto lo que estoy haciendo con ella de un momento a otro?... Si eres tú el primero que me ayudó a unir cabos en la investigación —.

— Yo también soy policía, era mi deber involucrarme en la investigación que MI COMPAÑERO estaba haciendo... También porque si se trata de Snake cualquier persona podría ser sospechosa, y el hecho de que Moreau haya trabajado junto a nosotros la hacía muy peligrosa en caso de que ella fuera el criminal — frunció más el ceño — lo que me molesta es que tú estas jugando con ella... ¡Estás tan obsesionado con atrapar a Snake que te importa muy poco tener que lastimar a una mujer en el proceso! — se cruzó de brazos.

— Debía ganar su confianza de alguna manera y sabes perfectamente lo difícil que puede llegar a ser Moreau. Era necesario —.

— No, no era necesario... Pudiste haber hecho lo que hice yo luego de que tú te engancharas al acertijo... ¡Se más realista, Naoto!... — resopló — no estamos en un jodido juego de aventuras... ¿Que su apariencia concuerda con las rimas? Si, pero eso tiene una explicación... El nombre del paciente psiquiátrico es Arami Masumane, fue asistente del papá de Moreau, es bastante obvio que la conozca... Y no, tampoco fue que reveló la identidad de Snake. Masumane quedó psicológicamente afectado por la muerte de su jefe, solo dice disparates sobre serpientes y el 90% de sus comentarios no tienen ningún sentido. Se vió relacionado al criminal porque en su antigua casa se encontraron aplastados varios cuerpos —.

— ... ¿Tú cómo sabes eso? — le preguntó abriendo los ojos más de lo normal.

— Porque yo sí pensé de manera correcta y me puse a investigar más a fondo... No como tú, que fuiste directo a ganarte la confianza de Moreau diciéndole palabras bonitas y comportándote como el papá perfecto — escupió con cierto desagrado — en muchas cosas tuviste razón, pero te cegaste tanto con idea de que ella es Snake que nunca te dedicaste a ver más allá... Los sujetos de las cárceles, le debían más dinero del que puedes imaginar a Boten, la tortura fue una orden... Y la habitación de robótica, sólo hay prótesis y pequeños robots que seguro hizo por aburrimiento. La tecnología de Snake sigue siendo por mucho más compleja que la de Moreau —.

Se quedó callado, escuchando Incrédulo lo que decía su compañero de trabajo.

— Ya te lo dejé claro, ella está limpia... Así que dile la verdad o yo mismo se la diré — se plantó en su lugar, cruzando los brazos a la altura de su pecho se le quedó mirando de manera amenazante.

— No te atreverías —.

— ¿Quieres averiguarlo? —.

=•=•=

El delicioso desayuno en su estómago desde hace un rato había hecho digestión, dando paso al hambre del mediodía.

Aún en el lugar estando al pendiente de todo lo que dijeran sobre Asa, caminaba por los pasillos buscando al pelinegro para invitarle un almuerzo que compartirían con Taishi e Imai.

— ¿Donde se metió? — murmuró para sí misma.

Caminó un poco más y se detuvo bruscamente en uno de los pasillos al escuchar una discusión, reconociendo ambas voces optó por mantenerse escondida.

— ¡¿Me estás amenazando?! —.

— ¡Si, es justamente lo que estoy haciendo!... ¡Porque no te ha hecho nada malo y ya me harté de que la estés usando a tu antojo! — gritó Komatsu de regreso.

— ¡Si yo no- Agh! ¡Admite que si te gusta de una vez por todas y deja de esconder tus celos detrás de esa imagen de mejor amigo proyector! —.

— ¡¿Y si me gusta que?! ¡No debería importarte, pues ella para ti no es muy diferente a cualquier sujeto de investigación! ¡¿No es así, Tachibana?! — gruñó — ¡¿Que tanto te cuesta dejarla en paz y decirle que todo fue una mentira?! ¡¿O me dirás qué si te terminaste interesando en ella luego de haberla conocido mejor?! —.

— ¡No digas estupideces!... ¡Ella es molesta!... A veces se cree mi mamá y en ocasiones siento que salgo con un delincuente de diecisiete... Lo que me dé Moreau me lo puede dar cualquier otra mujer, no es nada especial —.

... Auch.

— ¡¿Entonces por qué simplemente no la mandas a volar?! Si tan poca cosa la consideras, no te importaría deshacerte de ella —.

— ...Terminaré con esto cuando encuentre el momento adecuado. No te metas —.

— ¿Momento adecuado? ¡Por Dios, Tachibana!... En esta situación no hay ningún momento adecuado. Este estúpido plan tuyo ni siquiera tuvo que haber empezando en primer lugar, mientras más rápido le digas que todo fue un engaño, menor será el daño para ella — le dio la espalda dispuesto a retirarse, ya no quería seguir discutiendo — ¡Y mi amenaza sigue en pie, dile la verdad o yo mismo se la diré! —.

Al escuchar la voz de Komatsu acercarse en su dirección, retrocedió un par de pasos para fingir que acababa de llegar.

Tropezando a propósito con el de cabellos cobrizos cuando este cruzó en la esquina del pasillo.

— ¡Oh! More-san... Lo siento, no te vi — se disculpó con una pequeña sonrisa en labios.

— No te preocupes, de hecho, te estaba buscando — le dijo ella, sonriendo de regreso.

— ¿A mí? — ladeó la cabeza confundido.

— Mmhmm — tarareó en afirmación — ¿Quieres almorzar con nosotros?... Ya sabes, Taishi... Imai —.

— ... Ah- si, por supuesto — contestó agrandando su sonrisa.

— En el lugar venden una comida que te gustará mucho, te juro que querrás comer ahí todos los días a partir de ahora — lo sujetó suavemente del brazo, guiando sus pasos a la salida de manera rápida.

— Si tú dices que está buena la comida, entonces lo está jaja~ —.

Por otro lado, el de cabellos negros iba caminando en dirección contraria con las palabras del ojiverde resonando en su cabeza.

¿Ahora que haría?...



Bye bye~

Snake • Tokyo RevengersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora