The Old Toons 3️⃣

Mommy long legs

Espero que les guste~

Los poderes de Ink eran erráticos y torpes, activándose sin intensión en ciertos momentos, tal y como sucedió ese día. Bendy y ella cayeron por un repentino portal, encontrándose dentro de un lugar de aspecto sucio y abandonado.

-Lo siento...- ella bajo las orejas, avergonzada.

-Nha, no te preocupes- negó él, sin estar realmente molesto, mostrando una divertida sonrisa. Miro a su alrededor con aire distraído, notando los poster pegados en las paredes que mostraban personajes de seguro pertenecientes a ese pequeño lugar. Una risa repentina llamo la atención de ambos y, de uno de los pasillos, moviéndose como una araña realmente grande apareció. Era totalmente rosa, con el cuerpo algo redondo y con las extremidades estiradas, su cabello parecido a plastilina atado en una coleta al costado.

-Hola~- saludo, una sonrisa dibujándose en su rosado rostro, los ojos verdes mirándolos fijamente. 

-Amm, ¿querida?- llamo el demonio, dudoso de que hacer a continuación.

-Sígueme el juego- susurro la coneja, mirando a la recién llegada con una gran sonrisa. -¡Hola Mommy!- saludo y eso pareció hacerla feliz. -Mi nombre es Ink y él es mi amigo Bendy- los presento.

-Hola Mommy- saludo con una sonrisa, fingiendo emoción, su cola moviéndose con algo de nerviosismo tras él.

-¿Qué hacen ustedes dos aquí?- pregunto, su voz resonando ligeramente por el lugar. Daba algo de escalofríos la verdad.

-¡Vinimos a jugar!- ella se apresuro a responder y sin borrar su sonrisa.

-¡Si!- él se aseguro de asentir, enérgico. -Escuchamos que tus juegos son los mejores, así que vinimos- la sonrisa de Mommy se agrando, sus ojos verdes incluso parecían brillar un poco con alegría, sus largas extremidades parecieron retractarse, parándose sobre sus pies y con las manos entrelazadas frente a su pecho.

-Mi pequeños...- los alzo a ambos y ellos usaron todo su autocontrol para no tensarse, optando por acomodarse lo mejor posible en el agarre ajeno. -...es hora de jugar, vamos a divertirnos~- y empezó a caminar, el par mirándose entre ellos con nerviosismo. Solo debían jugar un rato con ella y luego podrían irse, solo debían hacer tiempo para que Ink los devolviera al Paramo, todo iba a estar bien.