No eras lo que pensaba

Capítulo 6

La joven de particulares ojos rosas, se hallaba sumamente nerviosa sobre su encuentro de hoy con aquel chico moreno, sentía que se había aventurado muchísimo al dar esa modesta insinuación, pero ella sentí algo por ese chiquillo, lo sentía cuando ambos eran aún unos niñitos que se la pasaban jugando, ahora sentía aún más cosas por él, y Ekko la abrazaba tan firmemente, y esos rápidos latidos que oía en el cuando se acercaban, sospechaba que sentía lo mismo por ella, esas sonrisas, ese cariño, su Ekko ¿La quería también? Creía que si, pero le aterraba saber el verdadero resultado, por un momento estuvo a punto de no ir al laboratorio, huir de nuevo de Ekko, pero recordaba su petición en la torre, le pidió tan amablemente que no huyera...    No quería defraudar a su hombrecito.

En el almuerzo no pudieron encontrarse, ya que llegaron un poco tarde, pero tenían un mejor lugar para encontrarse.

Jinx entró en el laboratorio de pociones, a esas horas estaba completamente vacío, era todo para ella, o para los dos dentro de unos minutos, Jinx dejó su bolso en el suelo y se sentó junto a este, traía su propio caldero y le gustaba practicar sus pociones en el suelo, según ella porque así se hacían mejor, pero en realidad era debido a recuerdos nostálgicos, de cuando imitaba las preparaciones de su padre Silco sentada a sus pies mirando atenta todo lo que hacía.

No estaba segura de cuanto tardaría Ekko en llegar, así que empezó a practicar por su cuenta, tenía una fórmula nueva que estaba probando y aún intentaba obtener el equilibrio de esta para que funcionará.

–Ya te di ajenjo, piel de serpiente, y plumas de avestruz, que más quieres? Alabastro? Tienes 3 pizcas...   Pero de ajenjo tienes 5 ...   Bien, me parece justo

Jinx estaba aún hablando con su caldero, cuando Ekko entro en el laboratorio, vio a la chica sacando algunos elementos de su maleta, mientras hablaba aún con el caldero, era una visión extraña, claro, pero Ekko no dijo nada al respecto, aunque aquello le parecía raro Jinx se veía feliz, eso era más importante, el simplemente la saludo para hacerse notar.

–oh hombrecito, llegas justo a tiempo, esto funcionará, o hará kabum, pero cualquiera de los dos será divertido

–que intentas hacer?

Jinx hizo un pequeño pucherito de pronto, miro a los lados como si hubiera alguien que pudiera oír los y luego se acercó más a Ekko y le susurró.

–es para mi padre, intento encontrar una fórmula que eliminé parte de su maldición y no solo la retenga, o que al menos le dé más movilidad a su ojo

Ante sus últimas palabras Jinx guiño con el mismo ojo que su padre tenía lastimado, quería poder ver lo hacer aunque sea ese gesto tan simple, quería ver lo más recuperado, Ekko sonrió enternecido ante aquel objetivo tan noble de la chica, con que eso era lo que la había tenido explotando el laboratorio más de lo usual, Ekko se sentía conmovido por aquello, quería ayudar a Jinx en eso, así que se sentó a su lado, no tenía tanto conocimiento de pociones como lo tenía Jinx, pero conocía bien las fórmulas de las mismas, y la ciencia tras crear nuevas, en algo le podría ayudar.

Ekko pregunto a Jinx con que estaba haciendo su nueva poción, Jinx le nombró los materiales que había usado y Ekko le recomendó agregar un componente más, que serviría para intensificar los demás componentes y mantener los unidos, también le ayudó a equilibrar los ingredientes que ya tenía, Jinx lo removió todo con ánimo tras ponerse sus lentes de seguridad, y para el alivio de ambos la poción no explotó, solo cambio a un color más uniforme y brillante, una especie de azul eléctrico.

–creo que funcionó!

Dijo Jinx sumamente emocionada terminando de revolver la sustancia, Ekko un poco más precavido se acercó para ver el resultado.