-¿Sam lo sabe?- pregunto el jugando con un mechón de mi pelo. Estábamos tumbados en mi cama, el estaba medio sentado con la cabeza en el cabecero de la cama, yo estaba tumbada en su pecho desnudo, escuchando batidos de su corazón. Mis ojos aun estaban cristalizados, por tanto llorar.
-No, eres primero en saber todo sobre esa mierda.
-Pero si ella es tu mejor amiga ¿no?- me dijo.
Me levante de cama sin contestarle. Fui a mi escritorio y abrí un cajón que estaba cerrado con una llave. Cogí de el una cajita negra y me acerque a el.
-Normalmente los consideró a ellas mis mejores amigas.- abro la cajita y dejo que el vea 8 de mis cuchillas. La caja por dentro es de color gris claro, así que la sangre destaca muy bien en las paredes de la caja. Las cuchillas estaban con algunas gotas de sangre resecadas.
-Noah, quiero que dejes de hacerlo. ¿Cuando fue la ultima vez que lo hiciste?- me pregunto el cogiendome de las muñecas para que deje ir la caja. La caja se cae en la sabanas y mas cuchillas salen de ella. Una lágrima cae de mi ojo.
-Creo que... Hace 3 semanas...- agacho la cabeza, y las lágrimas empiezan a caer sobre las cicatrices.
Jo aparta las cuchillas y me lleva hasta el para abrazarme.
-Me llevare todas estas cuchillas. Y tu estarás mas feliz. Te lo prometo.
Estuvimos abrazados un rato, pero nos sobresalto el ruido de la puerta principal. Cuando me levante de la cama mire el reloj. Eran 10:36p.m. Me seque las lágrimas.
-Jo esperame aquí, no hagas ruido. Voy a ver quien es.
-De acuerdo.
Por ultima vez me seque las lágrimas y dibuje en mi rostro una sonrisa, para disimular mis ojos llorosos. Jo noto esa falsa sonrisa y puso cara seria.
Baje abajo y vi a mi padrastro en la cocina.
-Noah, ¿has bebido todas las cervezas?- me pregunto al ver que en la nevera no ay ninguna botella de cerveza.
-Es que... Vino una amiga y pue...
-Noah, ya te dije que tu no puedes tomar cerveza, no tienes edad.- no me dejo acabar la frase.- Joder Noah. No vuelvas a tocar ninguna cerveca. ¿Como te lo digo? ¡Tonta!- esa era la segunda razón por cual no me caía nada bien ese capullo.
-Noah, ¿Ay algún problema?- abri ojos como platos y me gire. Jo estaba detrás mio con cara de mala hostia. Creo que el ha oído como Pablo me gritaba (Pablo es el nombre de mi padrastro).
-¿Quien coño eres y que haces en mi casa?- pregunto Pablo cerrando la puerta de la nevera con un portazo. A lo que yo cierre los ojos de miedo.
-Soy un amigo de Noah, y no creo que debas hablarle así.
-¿Me vas a decir tu como le debo hablar a esa?- dijo Pablo acercándose a Jo. Yo me puse delante de Jo para evitar que pase algo.
-¡Apartate!- me grito Pablo empujandome. Su aliento apestaba a alcohol. El estaba borracho.
-No la toques- dijo Jo cogiendome de la cintura.
-Soy policía, puedo meterte en la cárcel inventandome alguna chorrada que se van a creer todos. Así que si no quieres acabar ahí, vete ya de mi casa.- dijo Pablo empujando a Jo.- Y tu pequeña mocosa, estas castigada por no obedecer, ya pensare un castigo para ti.- dijo el cogiendome del brazo hasta hacerme daño. Le empuje y cogió la mano de Jo. Lo estire para que corra detrás mio. Subimos a mi habitación y yo cerré la puerta con pestillo. Escuchamos como Pablo subía por las escaleras gritando toda mena de palabrotas.
-¿Estas bien?- me pregunto Jo cogiendome de los hombros y examinandome de pies a cabeza.
-Si- le dije con lágrimas en los ojos.- No deberías meterte.- le dije poniendo mis mano en su pecho.
-¿Y dejar que te pegara? Sabes, no soy tan maricón. No puedes quedarte aquí esta noche. Iras a mi casa.
-Jo, muchas gracias por defenderme, pero tengo que qued...
-Ni de broma vas a quedarte aquí. Si hace falta, te secuestro.
-Mira Jo, no es la primera vez que pasa esa.
-¿Te ha pegado alguna vez en un estado así?
-Si...- dije recordando dolorida como el me pegaba. Y cuando mi madre me preguntaba que eran esos moratones, yo solo contestaba que me había caído o que me pegue con algo, tenia miedo a que si le contara eso a mi madre, Pablo me daría mas.
-¿Tu madre lo sabe?- me pregunto apretando mas mis hombros.
-No...- las lágrimas empezaron a caer. Los dos nos hemos quedado en silencio por un momento.
-Venga, coge todo necesario. Esta noche vas a pasar en mi casa.
-¿Y tus padres?
-No te preocupes, son buenas personas y muy majos, si le digo que eres una amiga mía y que tienes problemas con la familia, te darán una bienvenida muy agradable.
-Vale.
Me aparte de el y cogí una mochila, en ella puse mi cepillo de dientes, unas bragas limpias y ropa de recambio. Me puse unos shorts tejanos. Cogí mi móvil, el cargador, y peine. Me puse unas vans negras. Recogí mi pelo en un moño, unos mechones salían de el pero eso ahora no era el mayor problema.
Jo puso sus zapatos de antes, y recogió su mochila.
Abrí la puerta de mi habitación poco a poco, mire a la derecha y a la izquierda. No le vi por ninguna parte, le hice una señal a Jo de que no había nadie y que saliera muy callado.
Bajamos las escaleras, poco a poco sin hacer ningún ruido. Vimos que el estaba en el sala de estar en el sofá mirando la televisión. Bajamos silenciosamente. Decidí que mejor era salir por la puerta que lleva al jardín, por que no hacia ruido al abrirla.
La abrí y salimos al jardín, Pablo estaba aun en el sofá. Jo me hizo un gesto para que corriera hasta la valla. Al llegar a ella, Jo la salto, pero como yo no tenia tantas fuerzas, tenia que subirla un poco, luego cuando di un paso en falso, me caí con mi feminidad sobre la valla. Solté un grito a lo que escuchamos abrirse la puerta de mi casa. Jo me ayudo a bajar cogiendome de la cintura y poco a poco bajar. Los dos nos caímos a tierra. Oímos que Pablo gritaba "Puta, se que estas aquí, ya veras lo que te espera cuando llegues a casa." y entro en casa. Yo me puse de rodillas y me cogí de mi parte baja, solté un gemido, y Jo empezó a reírse de mi accidente en la valla. Yo hice lo mismo, empecé a reír. Jo se levanto y me ofreció la mano para que me levantara. Le di la mano y me levante un poco dolorida por lo que paso.
El abrió la puerta de su casa, y me hizo un gesto para que pasara. Cuando entre, me quede si palabras. Solo forme con mi boca un "WOW" y abrí ojos como platos.
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Engañados
Teen FictionNoah una chica suicida que muestra sonrisas falsas cuando por dentro esta gritando. Sus ultimos dias se llenan de nuevas amistades, un nuevo amor, unas amistades falsas y nuevas cicatrices. Una novela que te hara sentirte indentificado, te hara llor...