Capitulo 5 (Editando)

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*Dilan*
El televisor mostraba imágenes del accidente que acababa de ocurrir. La cadena local ya había grabado los restos del choque y estaban tomando declaraciones a la gente. "¡Dios mío! Ha debido de ser horrible". Uno de los testigos afirmaba haber visto como el encapuchado con la H en la espalda ayudaba a salir a unos niños y después sacaba a una chica inconsciente.

Víctor salió del baño en ese momento, aún tenía el pelo mojado y se había puesto algo de ropa limpia.

-Bueno Vic, ¿vas a decirme que es lo que ha pasado en el trayecto hasta aquí?
-Creo que las noticias hablan por sí solas, además, no quiero hablar más de eso.
-Has salvado a mucha gente.
-Ya, pero no he sido lo bastante bueno...
-¿Qué quieres decir?
-Evelyn estaba allí y no pude salvarla a tiempo, el fuego la abrasó y ahora estará en el hospital. No sé si esto es realmente hacer lo correcto.
-Víctor, mira, si no hubieras estado allí, quizas todo habría salido mucho peor. Hiciste lo correcto al salvar a esas personas, por mucho que lo niegues eres un auténtico héroe.
-Puede que tengas razón.
-Claro que la tengo. ¡Vamos!, sécate el pelo y ponte la chaqueta que tenemos que ir al hospital a ver qué tal está Evelyn.
-Mi chaqueta... ¡Oh, no!
-¿Qué pasa?
-La dejé tirada cuando salí a ayudar a Eve- Me dijo Víctor con desánimo.
-Bueno, no te preocupes, seguramente nadie pensará que es tuya, entre tanto jaleo puede habérsele caído a cualquiera.
-Espero que todos piensen como tú...

*Víctor*
El hospital estaba lleno de gente. Las enfermeras iban de aquí para allá atendiendo a gente con quemaduras. Dilan y yo nos dirijimos a la habitación 115, nos habían dicho que ahí es donde se encontraba nuestra amiga. Al entrar al cuarto vi que no estaba sola. También estaba Sonia, que se levantó de una silla y vino a saludar.

-Me alegro de que estés bien.
-¿Y por qué no iba a estarlo?- Le dije un poco nervioso.
-Maya me dijo que ibas a ir a casa de Dilan justo a la misma hora que sucedió el accidente, pensé que tú...
-Bueno Víctor, está claro que el accidente ocurrió mucho despues de que pasara, jejeje- Nos interrumpió Dilan tratando de encubrirme.
-Bueno, ¿y tú, Evelyn? ¿Cómo te encuentras?
-Bastante bien, gracias- Me dijo con una sonrisa.
-Nos has dado un buen susto. -Le dijo Dilan.- Pero me alegro de que estés bien.
-Sí pero, es curioso, el médico me ha dicho que estaba muy asombrado: a pesar de que el fuego de aquella explosión me abrasara, no sufro apenas ninguna quemadura, como mucho un poco de mareo por la sacudida.
¿Cómo podía ser eso posible?, yo mismo vi como el fuego le rozaba casi todo el cuerpo. Y ahí estaba, abrazando a mi amigo Dilan como si nada, esto realmente me dejó desconcertado.

-¿Y ese chico encapuchado que te ayudó?- Le preguntó Sonia.
-No llego a saber quién puede ser. Su voz me resultaba familiar pero el fuego me aturdió y no llegué a identificarlo.
-No pienses mucho en eso, Eve- Le dije- Será un don nadie con disfraz.
-Víctor, puedo asegurarte que no fuera un don nadie, pero él me salvó, cuando nadie me ayudaba el fue el único que tuvo el coraje de meterse en ese infierno y sacar a las personas, incluida a mí.
Esas palabras de mi amiga me hacían sentir bien por dentro, desde luego H estaba siendo algo positivo para la gente.
-Mi padre no para de hablar de él, puede que sea la causa de que no me mude a Madrid.- Dijo Sonia.
-Sí, por cierto, sobre eso...
-Ya hablaremos de ello, Vic. Ahora tengo que irme.
Sonia se marchó de la habitación, no sin antes despedirse de nosotros y desearle a Evelyn que se mejorara.

-Nosotros también deberíamos irnos.- Me dijo Dilan.
-Sí, Eve necesita descansar, ya nos veremos.

Nos despedimos de ella y noa dirijimos hacia la puerta de salida. Ya en la calle nos sentamos en un banco del parque y nos pusimos a reflexionar.

-Dilan...
-Dime.
-Creo que quiero continuar con esto. Eve tiene razón, si no hubiera estado yo allí, quién sabe lo que habría pasado.
-Eso está bien, pero si vas a ser un héroe de verdad, tendremos que hacer algo con esos músculos tuyos.
-Je, te veo más animado ahora que has vuelto a ver a Evelyn, ¿eh?.
-E..., no... no sé qué dices, tio.- Dilan se puso un poco nervioso ante aquellas palabras.
-Venga, admítelo, he visto cómo la mirabas en la sala, tu cara de alivio al ver que estaba bien...- Le dije para picarlo.
-Venga , no seas infantil.- Me dijo un poco serio.

Yo estaba a punto de pedirle disculpas y dejar la broma cuando alguien se nos acercó por la espalda.

-Vaya vaya vaya, no sabía que los "héroes" tenían tiempo de descanso.

Su voz me resultaba familiar. Nos giramos los dos y vimos con asombro de quién se trataba. Era Maya, estaba allí frente a nosotros con su mochila. Me miraba fijamente con una sonrisa.

-Maya..., qué sorpresa ¿Qué haces tú por aquí?
-Corta el rollo, Dilan. Lo sé todo- Le dijo.
-Bueno, Víctor, como sigas siendo tan descuidado algún día te pillarán y eso no es propio de los héroes.
Se me cortó la respiración al oírle decir aquello.
-No..., no sé de qué me hablas Maya.
-Haber si esto te refresca la memoria.
Sacó mi chaqueta de su mochila y me la enseñó.
-Te la dejaste en el lugar del accidente.
-Oye, ¿podemos ir a hablar de esto a un lugar más tranquilo?- Le dije, totalmente desanimado.
-Por supuesto. Y tranquilo, no tienes que preocuparte por nada.-Me dijo guiñándome un ojo.

Ya en casa de Dilan nos sentamos los tres y empecé a contarle todo lo sucedido desde el otro día hasta hoy.

-¡Qué fuerte! ¿Así que todo lo hiciste solo por conservar a tu amiga?
-Sí, te parecerá un poco tonto pero..., ahora que he visto lo que Hache puede hacer por la gente, me he planteado seguir con esto.
-No me parece algo tonto, me parece algo genial.
Me miró y supe entonces que podía confiar en ella.
-Pero si vas a ser un héroe, tendremos que hacer algo con tu entrenamiento.
-Y con su uniforme.- Se oyó a Dilan gritar por el pasillo.
-Espera, ¿tendremos?- Le dije con un tono de duda.
-Sí, claro, es lo menos que puedo hacer por el héroe que me salvó.- Me dijo dándome un golpecito en el brazo.
-A ver, ¿qué deporte practicas?
-Bueno, hace unos años estuve practicando softcombat con Dilan. ¿Eso vale?
-Ni de coña, tio. Te dije que no volvieras a mencionárselo a nadie.- Me dijo Dilan con un aire enfado y vergonzoso.
-Pensaba que te gustaba, Sr Dilan de la séptima cruzada, jajajaja.
-Te dije que no me llamaras así.- Dilan se llevó las manos a la cabeza avergonzado y Maya no pudo evitar soltar una risa.
-Aish.-Dijo Maya suspirando.- sois los mejores, chicos.
-Espera, ¿tu padre no tenía un viejo gimnasio aquí cerca?- Le dije a Dilan.
-Es una buena idea, podemos ir despué de las clases a entrenar y aprender defensa.- Me dijo Dilan.
-Perfecto chicos, y lo del traje dejádmelo a mí, estoy segura de que podré hacer algo para arreglarlo.
-Muchas gracias Maya-Le dije con una sonrisa.

Muy bien, ahora sí que estoy en el buen camino, dentro de poco todo va a cambiar.

H de Justicia (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora