H de Justicia (Editando)

Capitulo 31

*Dilan*
Solo podía oír los latidos de mi corazón y mi respiración entrecortada.

Paro y acerco mi mano al cuello.Me tomo las pulsaciones. ‎Mi corazón va muy acelerado y parece que me vaya a estallar del pecho. Bajo la marcha y me paso la mano por la frente limpiando él sudor.

-El sol pega fuerte esta mañana...Dios, ya esta empezando ha hacer calor. Se nota la llegada del verano.- Dije parandome a tomar una bocanada de aire y estirar un poco bajo la sombra de un árbol.
¿Con quien estoy hablando? La subida de temperatura está haciendote perder la cabeza amigo mio...me reí interiormente. Puede que si me este afectando.

Alcé el brazo izquierdo y miré mi reloj. No son ni las diez. Eso significa que puedo correr un poco más. Total las primeras horas de clase no son importantes estos días.

Me até de nuevo las zapatillas y continúe mi marcha.
Me costaba respirar, me quedaba sin aire...no debería de haber parado antes..
‎
Cuando estaba a punto de frenar y rebajar mi ritmo... algo me hizo tropezar y caer contra el suelo.
Note como me raspaba las piernas y las manos.

-¡Mierda!...Aaag.- chille desde lo más profundo de mi ser.
Me dolía la rodilla.
- Genial, esto es perfecto- dije en voz alta con un toque de ironía- ¿Con qué... he...tropezado?. - dije en voz alta cabreado.

Me incorporé en el sitio. La pierna izquierda estaba enrojecida.
Y esto me pasa por entrenar en pantalón corto.- dije pensando hacia mi...

Me quité el polvo y la arena de la ropa. Me acerqué al sitio donde había tropezado.
Y me llamo la atención. La zona estaba agrietada. Como si una fuerte sacudida o un golpe hubiese partido el suelo en dos.

-¿Una grieta?.-dije extrañado.

Observé con detenimiento la franja agrietada que atravesaba gran parte del barranco. Parte de la zona había sufrido como una falla. Siempre suelo venir a correr por aquí y es la primera vez que veo algo así.
‎
- ‎¿Esto ha sido de la noche a la mañana? ¿Cómo es...?.- pensé hacia a mi.

Me quedé callado. Se escuchaba algo, como un zumbido, un murmullo que retumbaba bajo la tierra.

-Esto es subrealista.- Me agaché para escuchar mejor.- Viene...¿de debajo de la tierra?.- dije en alto.
-‎¿¡Qué coño!?.- dije sin saber que pemsar realmente.

Me puse en pie de nuevo y me alejé poco a poco para ver todo con más prespectiva. La grieta parecía estar a punto de extenderse hacia las vías del tren. A este paso iba a hundir toda la zona. Me quedé flipado ante aquella situación...

*Ziiip...Ziiip*

El móvil me saca de mi aturdimiento. Lo saco del bolsillo. Y veo que tiene una notificación de video. "La llamada del deber". El evento empezará en un minuto.

-¿Un video en directo?.- dije extrañado...

Me quedo mirando la pantalla.- Yo no he progamado nada...- Pensé.

- Bah, publicidad de Youtube- dije prácticamente convencido.

Cerré la aplicación y me meto el móvil de nuevo en mi bolsillo.

-Estas tu que voy a gastar los datos para ver un video, ya lo veré si eso en casa- dije más que convencido.

Me puse de nuevo en camino y arranqué a correr otra vez hacia el pueblo.

☆Maya☆
No podía dejar de mirar el reloj. ¿Por qué no puedo dejar de mirar el relog?. Espabila Maya, espabila.- Me di un par de golpes en la cara. Solo es Víctor, tu amigo....Tu amigo que ahora sabes que esta enamorado de ti...-Noté que empezaba a ponerme roja. A no... ¡Eso si que no!. Me acerqué al espejo de mi habitación y me mire de arriba abajo.
-Estas preciosa, todo va a salir bien y no tengo porqué estar nerviosa.- Me dije con seguridad. Sonreí al verme tan decidida. Dios...esto es una locura.- reí. Yo y Víctor...-Se me puso otra vez esa sonrisa en la cara. Miré de reojo el relog de mi pared.- Venga, ya casi es hora.- fuí corriendo al baño para cepillarme el pelo por decima u octaba vez esa mañana. Despues de arreglarme un poco, ya me sentía preparada para salir.- Bien, creo que lo llevo todo.- revisé mi bolsa antes de salir de casa.- Mierda el móvil.- corrí a mi cuarto a buscarlo. Me lo había dejado en la cama. Cuando me acerqué vi que tenía una luz blanca parpadeando.